Después de que la industria automóvil cesase por completo su actividad a mediados de marzo, algunos fabricantes han vuelto a retomar su trabajo el lunes 27 de abril. Lo han hecho de forma progresiva y bajo medidas especiales que garanticen la protección de sus trabajadores. SEAT ha abierto su planta de Martorell para que se puedan reincorporar sus 3.000 trabajadores, tras haberles realizado un test PCR (diagnóstico fiable de COVID-19).
Mercedes-Benz también abrió sus puertas en Vitoria, y Volkswagen en Navarra. Hasta 1.600 empleados de esta última empresa se reincorporan, siendo 1.250 operarios de mano de obra y 350 en puestos de dirección. Lo harán mediante controles de temperatura, con mascarilla, guantes y solo en turno de mañana. Esto significa que el número de vehículos diarios producidos se reducirán, concretamente a 527 unidades.
Volkswagen también ha anunciado que pasadas cuatro semanas añadirán el segundo turno con una hora de descanso entre ambos, en el que la planta será desinfectada, al igual que por la noche.
Nissan también reabrió el lunes en su planta de Ávila y Los Corrales de Buelna (Cantabria), ambas de componentes. El 4 de mayo lo hará en la Zona Franca de Barcelona, con 2.000 trabajadores que volverán a poner en funcionamiento su línea 2, que produce furgonetas y pick-up. Por su parte, Ford ha desestimado la producción de vehículos y motores en Almussafes (Valencia) hasta el 4 de mayo, tal y como las demás factorías de su grupo. La empresa y los sindicatos llegaron a un acuerdo para llevar a cabo un ERTE que afecte a los 7.400 trabajadores.
En cuanto a Renault, ayer reanudó su actividad al 40 % en Palencia y en las plantas de montaje de carrocerías ubicadas en Valladolid. Durante el lunes y el martes impartió formación a sus trabajadores sobre los pasos a seguir a la hora de poner en marcha de nuevo las fábricas con la mayor seguridad posible. Al igual que Volkswagen, la empresa francesa contará de momento con un solo turno, además de una inyección económica de 5.000 millones de euros del Gobierno de Francia mediante un préstamo.
Renault aplicó un ERTE a sus 11.000 trabajadores hasta el término del estado de alarma
De momento, Iveco no reanudará ningún tipo de actividad en España (fábricas de Madrid y Valladolid). Esto es debido a que las plantas que les suministran sus piezas se encuentran en el norte de Italia, cerradas por la crisis del coronavirus. Por lo tanto, los 3.300 empleados que hay entre las dos plantas españolas no podrán reincorporarse hasta el 11 de mayo, fecha prevista para la reapertura de las plantas italianas.
PSA anunció que volvería a poner en marcha la actividad de sus marcas integrantes en Europa (Citröen, Peugeot y Opel) cuando las ventas de coches volviesen a subir. Solo en ese caso comenzaría de nuevo la producción de la agrupación francesa, y siempre a un ritmo menor que el de las matriculaciones. En la planta de Vigo trabajan alrededor de 6.500 empleados, en la de Zaragoza 5.500 y en la de Madrid 1.300.
Los fabricantes de componentes también han comunicado sus plazos de apertura. Michelin ya ha vuelto a su actividad de forma progresiva, principalmente en las plantas de Burgos y en Valladolid, pero también las que se destinan a pruebas, como Almería, Lasarte o Vitoria. La reapertura de Gestamp, CIE Automotive y Bridgestone estarán sujetas a la nueva actividad que se de en el sector de la industria y en los clientes.
Enrique Delgado
Terminando la carrera de audiovisuales y empezando en el mundo del periodismo con el espíritu de aprender sobre motor. Siempre tengo un ojo para lo que ocurre en el mundo y otro en absorber todo el conocimiento que pueda sobre él para escribir literatura, mi hobby personal.COMENTARIOS