Ford parece estar obsesionada en los últimos tiempos por incrementar su participación en competición a lo largo y ancho del globo. El óvalo azul está próximo a acompañar a los propulsores de Red Bull Powertrains en la Fórmula 1, y ya están preparándose para su desembarco en el Gran Circo tras el próximo cambio de reglamento previsto para 2026. Hace poco más de un mes, durante la celebración de la edición centenaria de las 24 horas de Le Mans, el fabricante estadounidense presentó su Ford Mustang GT3, dispuesto para afrontar este desafío en los próximos años.
En días recientes hemos conocido otra noticia que ahonda en este espíritu carrerista que podríamos considerar recuperado por parte de Ford. Y se trata, además, de un movimiento que pone de manifiesto un compromiso absoluto, puesto que hablamos de una serie monomarca protagonizada por su Mustang Dark Horse R. Los automóviles para esta competición añaden una R a la versión del modelo dirigida para su uso en circuito, pero muchos de los elementos se trasladan de uno a otro sin apenas cambios.
El Ford Mustang Dark Horse R llena el hueco entre las versiones GT3 y GT4 del modelo”, afirmó Mark Rushbrook, director global de Ford Performance Motorsports, quien añadió: “El Dark Horse R ofrece a nuestros apasionados clientes no solo un coche de carreras accesible, sino también una serie monomarca para que los entusiastas del Mustang compitan entre sí”
El objetivo de Ford con este Mustang Dark Horse R es el de ofrecer un vehículo más accesible que sus GT3 y GT4 para quienes quieran adentrarse en el mundo de las carreras. Al reducir un tanto su complejidad y la especialización de sus componentes, se reducen los costes y se abre la puerta para nuevos participantes. Por tanto, bajo su capó delantero se sitúa el mismo propulsor de ocho cilindros en uve y cinco litros de cubicaje, unido a una caja de cambios manual de seis relaciones fabricada por Tremec. Solo se le sustituye el cárter por uno adaptado para la competición y se introducen algunas mejoras en su sistema de refrigeración. La marca no ha querido especificar cuál es el nivel de potencia que se extrae de este motor en su aplicación para este Ford Mustang Dark Horse R. Como referencia, cabe apuntar que el modelo de calle en el que está basado alcanza 500 CV de potencia máxima y 566 Nm de par.
También los frenos son el mismo equipo de origen Brembo que se instala en el Ford Mustang Dark Horse de calle, aunque, de forma análoga a lo comentado anteriormente con el motor, estos cuentan con mayor capacidad de refrigeración en esta versión R de competición. El diferencial de deslizamiento limitado tipo Torsen sí permanece intacto en esta versión.
A nivel de chasis y tren de rodaje son más visibles los cambios realizados para su conversión en automóvil de competición. Así, cuenta con una jaula antivuelco que mejora su rigidez, complementada por diversas soldaduras extra en los componentes de su chasis. La suspensión MagneRide del modelo de calle se sustituye por unos amortiguadores fabricados por Multimatic, y también se incluyen nuevas barras estabilizadoras. Eso sí, visualmente no hay un cambio tan radical como el que podemos ver en otras adaptaciones para competición, puesto que Ford ha optado por conservar el paquete aerodinámico de serie en este caso.
La nueva Mustang Challenge es el nuevo miembro perfecto para la familia IMSA y nos sentimos agradecidos a Ford, nuestro socio de largo recorrido, por haber confiado en nosotros para acoger las competiciones de esta nueva plataforma”, comentó John Doonan, presidente de IMSA
Por supuesto, su interior se ha despojado de todo aquello que carece de utilidad para su uso en competición. De este modo, en su habitáculo tan solo está presente el asiento del piloto, fabricado por Recaro y frente al cual se sitúa un volante de competición de Sparco que puede retirarse para facilitar el subirse y bajarse del vehículo. Cuenta con diversos indicadores para que el piloto disponga de toda la información necesaria durante las carreras y también se ha añadido el equipamiento de seguridad pertinente para cualquier automóvil de estas características, consistente en, entre otros, un equipo de extinción de incendios y una red de seguridad.
El Ford Mustang Dark Horse R comenzará a producirse próximamente, puesto que todas las unidades que se inscriban en el campeonato monomarca habrán de estar listas para cuando este dé comienzo el año que viene. Quien desee participar en esta Mustang Challenge, que tendrá un calendario con entre 10 y 12 citas acompañando a la IMSA, habrá de afrontar el pago de unos 145.000 dólares estadounidenses —unos 169.000 euros al cambio de hoy— solo por hacerse con una unidad de este modelo.
David García
No conozco sensación mejor que la de un volante en las manos. Disfruto también con ellas sobre el teclado, escribiendo ahora para vosotros algo parecido a aquello que yo buscaba en los quioscos cuando era un guaje.COMENTARIOS