Cada vez que aparece una patente sobre motores rotativos por parte de Mazda, los rumores sobre el regreso de los Mazda RX al catálogo se disparan casi sin control. Es como una enfermedad que se extiende rápidamente sin que realmente haya una base para que ocurra, simplemente, las ganas de la gente de ver algo especial después de tanta falta de carácter. Y esto no es algo que solo afecte a Mazda, por lo general, todos los fabricantes han dejado de ofrecer ese algo especial que les caracterizaba, para poner en catálogo propuestas iguales unas a otras, pero diferenciadas por diseño y por el logo que adorna cada frontal.
No obstante, no es el tema que nos ocupa, ahora nos importan unas nuevas patentes que han publicado en Carbuzz, sobre nuevos desarrollos de Mazda basados en motores rotativos. Unas patentes que, según parece, se publicaron a comienzos de junio de 2023 y muestran nuevos diseños de un motor Wankel con dos rotores. Esos dos rotores son una parte importante del conjunto, pues podrían implicar una aplicación más importante que servir de generador de energía para un grupo motor híbrido en serie como ocurre en el Mazda MX-30 e-Skyactiv R-EV.
Obviamente, ya desde Carbuzz se hace referencia a los míticos deportivos japoneses, los Mazda RX-7 y RX-8 y mencionan que la firma nipona no renuncia a poner en circulación un reemplazo para dichos modelos, aunque también afirma que esto ocurrirá “algún día”. El caso es que, de ocurrir, ese “algún día” debería ser ya, a no ser que se desarrolle con los combustibles sintéticos en mente. De todas formas, no debemos olvidar que desde la propia marca, se dijo una vez que les encantaría mantener vivos a los modelos RX, dado que son parte integral del legado de la marca.
Si volvemos a las patentes, nos encontramos con un total de seis, de las cuales, tres hacen referencia a un motor Wankel y por lo visto en ellas, el trabajo de Mazda es muy interesante. La firma se ha centrado en mejorar la eficiencia, uno de los pilares más flojos del motor rotativo –como lo es también del motor de “dos tiempos”, cuyo funcionamiento es muy similar solo que con pistones en lugar de un lóbulo con forma triangular–. La eficiencia de los motores de combustión interna es un apartado que ha recibido mucha inversión y que a día de hoy es tema de debate, pues la próxima Euro 7 obligará a dar un salto tan grande, que desaparecerán, casi por completo, los motores de combustión interna sin hibridación. Las repercusiones serán todavía mayores, pero eso lo dejamos para otra ocasión.
Las patentes hacen hincapié en la forma de los rotores y en los huecos practicados en los mismos. Cada uno de los bordes del rotor, tienen diseños diferentes y cavidades con diferentes tamaños, formas y posiciones. Cada hueco representa la cámara de combustión del rotor y las diferentes formas buscan mejorar la eficiencia de una manera concreta, al igual que las prestaciones. Mazda afirma que la geometría de la cámara de combustión también permite modificar el avance del encendido según necesidades, así como mejorar la temperatura de trabajo. Los ingenieros tienen como objetivo, que la combustión se haya realizado al completo antes de que el rotor alcance la lumbrera de escape, lo que reduciría la fuga de gases sin quemar y de gases quemados de forma incompleta, lo que genera una elevada contaminación.
Por otra parte, también se puede apreciar que los ingenieros de Mazda trabajan en la admisión, así como en la influencia de la EGR en diversos aspectos del funcionamiento del motor. Curioso es que tres de las patentes relacionadas con la admisión, se muestran con un solo rotor, aunque no sería extraño que se aplicara a cualquier propulsor con más rotores.
Entre los detalles que podemos encontrar en las patentes, podemos destacar una admisión capaz de mezclar aire limpio con gases de escape mediante un colector de admisión que comprende la mariposa de admisión y una válvula de entrada para la EGR. Se trata de que los gases se hayan mezclado debidamente antes de su entrada a la cámara de combustión. Esa EGR cuenta con un tubo más rígido que, al parecer, busca reducir las vibraciones en el colector de admisión, con lo que se lograría un flujo de aire más suave y una reducción de las vibraciones y las turbulencias.
Con estas patentes solo se confirma el trabajo de los ingenieros con estos motores, aunque quizá sea ya un poco tarde para eliminar los ya consabidos problemas de los propulsores Wankel. Solo queda esperar que, de llegar a producción algún día, sean compatibles con los combustibles sintéticos.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS