Alfa Romeo parece haber encontrado un camino que le permita crecer, por fin, en número de ventas. Y ese camino es el Alfa Romeo Tonale, un SUV compacto que, como todo Alfa, entra por los ojos y desprende deportividad por cada tornillo y tuerca. Según datos de la marca, las ventas en España han crecido un espectacular 109% entre enero y febrero, lo que permite que escale hasta el “Top 10” del segmento premium español. Han sido 414 matriculaciones durante los dos primeros meses del año, de las cuales, 283 corresponden al Tonale, que se convierte así en el modelo más vendido de la marca. Y además, el 31,2% de esas matriculaciones tienen a las versiones híbridas enchufables como protagonistas.

Desde luego, son muy buenas noticias para la marca, que se encuentra en plena reestructuración y con unos objetivos muy ambiciosos, entre los que destaca la conversión a una marca totalmente eléctrica a partir de 2027 –solo en Europa–, algo que no será fácil y requerirá de una buena planificación y de unos modelos que sean realmente interesantes. Cosas, las dos, que ya están en pleno proceso y que tendrán como resultado el primer coche eléctrico de Alfa Romeo, el cual, llegará en 2024. No llegará solo, pues se verá acompañado de un grupo motor híbrido de nuevo desarrollo, pero será el primer paso hacia una electrificación que podría ser la clave para la estabilización de la compañía, o bien, el último clavo sobre el ataúd.

La electrificación de Alfa Romeo no será como en el resto de marcas, o eso al menos afirma el señor Jean-Philippe Imparato, quien ha confirmado que se mantendrá la tradicional carrocería sedán en la gama italiana, un tipo de coche de que siempre ha estado ligado a Alfa. Además, también ha confirmado que habrá versiones Quadrifoglio totalmente eléctricas. Son dos declaraciones que afectan, obviamente, al Alfa Giulia, que renacerá en 2025 como un coche totalmente eléctrico y de altas prestaciones, un posicionamiento bastante diferente al que actualmente tiene el modelo.

El primer coche eléctrico de Alfa Romeo será un SUV, y estará basado en la plataforma del Jeep Avenger, lo que servirá para rentabilizar la producción, pero que le hará perder cierta personalidad y cierto “purismo”. Posteriormente, llegará el Giulia EV, el cual, según se dice, contará con versiones que arrancarán con 345 CV y que contará con un tope de nada menos que 1.000 CV, correspondientes a la versión Quadrifoglio Verde. Datos muy ambiciosos, pero que ya no resultan sorprendentes, pues esos 1.000 CV parecen ser una cifra relativamente fácil de conseguir con motores eléctricos. Otra cosa será la autonomía y las prestaciones reales, pues no es raro ver coches eléctricos con potencias muy altas, pero prestaciones reales a la altura de coches menos potentes.

Dicho Giulia Quadrifoglio Verde, compartirá mecánicas con el Maserati GranTurismo Folgore y, por tanto, contará con tres motores eléctricos y por ende, con tracción total. También contará con sistema eléctrico de 800 voltios y una batería que rondará los 100 kilovatios/hora, suficiente para ofrecer una autonomía teórica de unos 700 kilómetros –obviamente, a velocidades legales y conducción tranquila–.

La conversión del Giulia a coche eléctrico supone dar la espalda a la plataforma Giorgio, que sustenta actualmente tanto al Giulia como al Stelvio. En su lugar se tomará la plataforma STLA Large de Stellantis, pensada especialmente para vehículos eléctricos para los segmentos D y E. Esto se debe a que la plataforma Giorgio no puede dar soporte a coches electrificados y adaptarla no tiene sentido por costes ni por tiempo, pues en 2025 entrará en vigor la normativa Euro7, que, recordemos, será especialmente restrictiva.

Efectivamente, un eléctrico de 1.000 caballos parece un objetivo especialmente ambicioso, de eso no cabe duda, pero es cierto que también es un objetivo alcanzable e interesante para una firma como Alfa Romeo. Pero no valdrá con un coche así para volverse más relevante, es necesario atacar otros frentes y por supuesto, ganar en competición, aunque en Fórmula 1 lo tienen bastante complicado, pues no estará presente en 2024 ni como patrocinador, así que habrá que redirigir los esfuerzos a otra categoría, mientras se sigue apostando por los coches de calle de altas prestaciones.

Desde Alfa Romeo ya confirmaron que hay un deportivo en camino, un deportivo que actualmente está en desarrollo e incluso, según parece, se han mostrado diferentes datos –maquetas, imágenes, bocetos… – a los posibles clientes y ya se han recaudado fondos para todos los procesos de construcción. No obstante, la decisión final de construir el coupé se tomará en primavera.