El Ferrari F2002 pilotado por Michael Schumacher encuentra dueño

El Ferrari F2002 pilotado por Michael Schumacher encuentra dueño

Por 5,99 millones de euros, es el segundo Fórmula 1 más caro jamás subastado


Tiempo de lectura: 3 min.

El chasis exacto del Ferrari F2002 que conducía Michael Schumacher cuando reclamó su quinto campeonato mundial en el Gran Premio de Francia de 2002 se ha convertido en el segundo coche de Fórmula 1 más caro que se haya vendido en una subasta, después de haber obtenido bajo martillo unos increíbles 6.643.750 dólares, 5.989.872 euros al cambio. Tan solo ha sido superado por el F2001, también de Schumacher (6,76 millones de euros).

A manos de Schumacher, el F2002 obtuvo 11 victorias en la temporada 2002. Por supuesto, esa dominación atrajo críticas, particularmente después del Gran Premio de Austria en el que se le pidió a su compañero de equipo, Rubens Barrichello, que se hiciera a un lado por su compañero. Pero lo cierto es que el chasis número 219 no solo fue conducido por Schumacher, sino también por Barrichello durante las pruebas de pretemporada en el Circuito de Barcelona-Catalunya.

Diseñado por Ross Brown y Rory Byrne, el Ferrari F2002 hizo su debut en el Gran Premio de San Marino a mediados de abril, y el piloto brasileño lo llevó hasta el segundo lugar en clasificación, mientras que el alemán alcanzó el primer puesto con el chasis número 220. Curiosamente, Ferrari cambió los coches para la carrera, y Schumacher llevó el #219 a la victoria. El F2002 fue el coche más rápido de la temporada, siendo uno de los F1 “más completos” jamás concebidos.

Ferrari F2002 5

El Ferrari F2002 #219 venció bajo la tutela de Michael Schumacher en los grandes premios de Austria, Francia y San Marino. Nunca terminó una carrera por debajo del segundo puesto

Después del Gran Premio de Francia, este ejemplar en concreto se usó como un coche de pruebas, y Ferrari lo retiró al finalizar la temporada. Desde entonces, se ha estado moviendo por numerosas colecciones privadas en todo el mundo. Ahora, regresará de nuevo a Italia para reconstruir su motor y su transmisión. Una vez que se complete el trabajo, se entregará formalmente a su nuevo propietario en la pista de pruebas de Ferrari, Fiorano.

Un Benetton B192 de 1992, conducido también por Schumacher, se vendió en la subasta de Abu Dabi por 653.645 euros, mientras que un Ferrari 126 C2 de 1982 pilotado por Mario Andretti a su podio final consiguió adjudicarse por 1,71 millones de euros. Sin embargo, la venta más cara del día no fue un antiguo monoplaza. El honor es para el Pagani Zonda Aether, que alcanzó los 5,45 millones de euros, llegando finalmente hasta los 6,14 millones de euros.

Ferrari F2002 3

Una parte de los ingresos de la última venta de RM Sotheby’s se destinará a una buena causa, la fundación Keep Fighting establecida por la familia de Schumacher tras el accidente de esquí en 2013 del piloto de carreras, que lo dejó con graves lesiones en la cabeza. Schumacher ha estado fuera de la vista del público desde entonces, pero la fundación continúa con su trabajo caritativo. Desde espíritu RACER, deseamos lo mejor.

Galería de fotos

COMPARTE
Sobre mí

Luis Blázquez

Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.

COMENTARIOS

avatar
2000
 
smilegrinwinkmrgreenneutraltwistedarrowshockunamusedcooleviloopsrazzrollcryeeklolmadsadexclamationquestionideahmmbegwhewchucklesillyenvyshutmouth
Foto
 
 
 
  Suscribir  
Notificar de


NUESTRO EQUIPO

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

Alejandro Delgado

Jesus Alonso

Javier Gutierrez

Mauro Blanco