A principios de marzo abrirá sus puertas el Salón del Automóvil de Ginebra, con la aparición de numerosas novedades, entre ellas un buggy eléctrico construido sobre la plataforma modular eléctrica MEB. El nuevo buggy 100% eléctrico de Wolfsburgo se inspira en los populares buggies californianos, construidos para circular sobre las dunas y demuestra las capacidades de la nueva plataforma para construir diferentes vehículos eléctricos.
Según Klaus Bischoff, diseñador jefe de Volkswagen: “Un buggy es más que un coche. Es vitalidad y energía sobre cuatro ruedas. Estos atributos se materializan en el nuevo e-buggy, que demuestra por una parte el aspecto que puede tener una reinterpretación moderna y no retro de un clásico, y por otra el vínculo emocional que puede crear la movilidad eléctrica”.
Los primeros Buggies, en los que se basa esta nueva creación, hacían uso del chasis del Beetle como base para su construcción. Del mismo modo, hoy, se utiliza la plataforma MEB demostrando su capacidad de adaptación. Este nuevo concept car se mantiene fiel a las construcciones americanas prescindiendo de un techo fijo o de puertas convencionales, al tiempo que incorpora un esquema de suspensión independiente en ambos ejes y neumáticos específicos para circular fuera del asfalto. Por su parte los pasos de rueda han sido magnificados y abiertos para dotar al buggy de una imagen más impresionante.
Este nuevo vehículo demuestra las capacidades de la plataforma MEB, con la posibilidad de realizar modelos dedicados a pequeños nichos de mercado, del mismo modo que el Beetle en el siglo pasado. Los modelos de fabricación en serie a gran escala representan una de las aplicaciones practicas de esta plataforma, pero no sólo servirá para al fabricación de estos vehículos.
La historia del Beetle y la fusión de la tecnología Volkswagen con los vehículos dedicados al ocio comienza con el Beetle descapotable y las carrocerías manufacturadas por compañías como Hebmüller y Rometsch, pasando por los diseños de carrocería completamente abierta que adoptara el buggy Meyers Manx. Todos estos vehículos se fabricaron sobre el chasis del Beetle, que permitió la fabricación de soluciones personalizadas y exclusivas hasta los años ochenta. Hasta 250.000 unidades de series especiales y modelos únicos llegaron a salir de sus lineas de producción y/o transformación.
Carlos Pascual
El olor a lubricantes y gasolina quemada han atraído a Carlos desde su niñez, por ello decide consagrar su vida a los coches: una forma de comunicarse, de disfrutar, de vivir.COMENTARIOS