Cuando Jaguar lanzó el F-Type en 2012 lo hizo exclusivamente con una caja de cambios automática de ocho velocidades. No se preveía una caja de cambios manual en el deportivo aspiracional de la casa británica. Pero suficiente gente le rogó a Jaguar para que ofreciese a sus clientes una versión con pedal de embrague, y lo consiguieron. En 2015 Jaguar decidió que su F-Type adoptase un cambio manual y tracción integral.

Para aquellos que querían disfrutar de la conducción por encima de las prestaciones, Jaguar montaba en su F-Type con motores de seis cilindros ­de 340 o 381 CV (y cuatro cilindros de 300 CV en Europa) de propulsión una verdadera configuración de tres pedales. Muchos de nosotros nos alegramos, y seguramente a ninguno de los que estamos aquí nos importaría acoger una unidad en nuestro garaje. Pero las matemáticas juegan en contra de la ilusión. Las ventas del Jaguar F-Type manual han sido testimoniales al otro lado del charco.

En abril de 2017 Jaguar introdujo en la familia F-Type una nueva variante de acceso, equipada con un motor turbo de 2.0 litros y cuatro cilindros que emite su fuerza al eje trasero mediante una transmisión manual. Es 52 kg más ligera y parte en 66.850 euros

Las versiones automáticas se llevan casi todas las ventas del F-Type en EEUU

Tan solo el 4 % de los conductores estadounidenses se decantan por esta opción. Con la renovación del coche para este año, Jaguar dará jaque mate al cambio manual. En Europa se salva, de momento. En Norteamérica el cambio manual tiene aún cabida en los coches aspiracionales. De hecho, no hay más que ver sus estrellas de Detroit: el Ford Mustang (salvo GT500), el Chevrolet Camaro, el Dodge Challenger (salvo SRT Demon) o el Chevrolet Corvette.

Si bien es una noticia entristecedora, no es una gran sorpresa. De por sí, el F-Type no está siendo un gran éxito de ventas para Jaguar Land Rover, a pesar de contar en su gama con un poderoso 5.0 V8 sobrealimentado por compresor de 575 CV cuyo gorgoteo es una delicia para los oídos. Pero los números no engañan. Por poner un ejemplo, si echáis un vistazo en plataformas de anuncios clasificados de coches a nivel europeo, veréis que apenas hay unidades en venta con caja de cambios manual.

Ante estos datos, parece que el chaparrón vendrá a nuestras tierras. Es probable que Jaguar retire el tercer pedal de su coupé aspiracional a lo largo de este año, o lo mantenga un tiempo más en su versión de cuatro cilindros. Si esta predicción se acaba por confirmar, el Jaguar F-Type se sumará a los ya de por sí numerosos coches que han vetado de por vida a la palanca de cambios tradicional.