El Ferrari 365 California se presentó en el Salón del Automóvil de Ginebra de 1966, y se consideró como una de las mejores obras entre los deportivos italianos descapotables. Diseñado por Tom Tjaarda para Pininfarina, se le acopló un motor V12 de 4,4 litros, convirtiéndose en un coche de referencia entre los deportivos sin techo rígido de alto rendimiento. Su reducida producción de 14 unidades -entre 1966 y principios de 1967-, junto a su exclusiva imagen y su elevado precio le incluyó en la élite de este tipo de vehículos. Ocho de las unidades se exportaron a Estados Unidos.
En esencia era el sucesor directo del Ferrari 500 Superfast coupé, pero con el techo plegable de lona. La numeración de los chasis se encontraba en la horquilla 08347-10369, dos de ellos con el volante a la derecha. Su proceso de producción era el mismo que el del 500 Superfast: el chasis se enviaba a Pininfarina, concretamente a la planta de Grugliasco, donde se carrozaba y se terminaba. Posteriormente se retornaba a Ferrari para que se le instalasen los componentes mecánicos.
Del parabrisas hacia adelante era prácticamente igual que el 500 Superfast, salvo algunos detalles secundarios como la protección de plexiglás de los faros, los faros antiniebla escamoteables situados en la parte superior del frontal, el abultamiento en la parte central del capó, la ausencia de salidas de ventilación de las aletas o la nervadura en el lateral de la carrocería.
Debajo del capó del Ferrari 365 California se escondía una joya en forma de motor V12 a 60 grados de 4,4 litros y 320 CV, que le convertían en el descapotable más rápido del momento
Desde el pilar A hacia atrás ya cambiaban cosas, como la presencia de una hendidura en forma de flecha en la parte superior de la puerta, con continuidad hasta la aleta trasera. Esta hendidura se dividía por una delgada moldura cromada que incluía la manilla de apertura de la puerta. Las aletas traseras presentaban una ligera curvatura en la parte superior del paso de rueda, descendiendo después para conectar con la línea plana del maletero y con un panel posterior vertical como remate.
Los pilotos traseros mostraban un diseño único en ángulo continuando la línea de cola, compuesto de tres luces circulares rodeadas de una banda reflectante a su alrededor. Los paragolpes estaban divididos en dos partes simétricas cada uno, y las llantas eran unas clásicas Borrani de radios de acero cromado. Las dimensiones eran las siguientes: 4.900 milímetros de largo, 1.780 milímetros de ancho y 1.330 milímetros de alto. La plataforma tenía una batalla de 2.650 milímetros, con unas vías delantera y trasera de 1.405 y 1.397 milímetros, respectivamente. Su peso homologado era de 1.320 kilogramos.
Al habitáculo accedíamos a través de dos grandes puertas, ofreciendo una distribución de 2+2 plazas, todo tapizado en cuero. El panel de instrumentos llevaba una plancha de madera de teca, conectando con la consola central que se prolongaba hasta los asientos traseros a modo de reposabrazos central. El cuadro central de instrumentos mostraba tres pequeños mánometros para la temperatura del aceite, del líquido refrigerante y presión del aceite. Estaban flanqueados por los dos grandes relojes del velocímetro y el cuentarrevoluciones.
Debajo de los tres pequeños manómetros centrales se encontraba la radio y, a ambos lados un medidor de nivel de combustible y un amperímetro. Los mandos de los elevalunas eléctricos se situaban en la consola central. La apertura del maletero y de la tapa del depósito de combustible se realizaba mediante sendas palancas cromadas situadas en la parte posterior del habitáculo.
El motor -con código interno 217B- iba en posición delantera longitudinal, con 12 cilindros formando una V a 60 grados y una cilindrada total de 4.390 cm3. Se basaba en el conocido Colombo de 4,0 litros, al que se le aumentó el diámetro de los cilindros. Entregaba una potencia máxima de 320 CV a 6.600 RPM.
La reducida producción del Ferrari 365 California de 14 unidades -ocho de ellas se exportaron a Estados Unidos- y su bella imagen lo convirtieron en un descapotable exclusivo y elitista muy codiciado por coleccionistas
La distribución se realizaba a través de un árbol De levas en cabeza por cada bancada de cilindros, con dos válvulas por cilindro. La alimentación era mediante tres carburadores dobles Weber 40 DFI/5, y el encendido con una bujía por cilindro y dos bobinas. Su velocidad máxima se estimaba en 245 km/h. El motor iba acoplado a una caja de cambios manual de cinco velocidades, que transmitía la potencia al eje trasero de tipo rígido.
El Ferrrari 365 California tenía suspensión delantera independiente, con brazos de diferente longitud, muelles helicoidales y amortiguadores telescópicos y barra estabilizadora. y eje rígido detrás con ballestas y amortiguadores telescópicos. El chasis era de tipo escalera, con tubos de acero de sección ovalada. El esquema de frenos contemplaba dos circuitos hidráulicos independientes, uno por cada eje, y cuatro frenos de disco, y la dirección era asistida.
Realmente no era un coche completamente nuevo ni mucho menos, pues del pilar A hacia adelante era muy similar al 500 Superfast, adoptando también la caja manual de cinco velocidades, el chasis y la suspensión. Con todo, resultaba un descapotable realmente atractivo y tuvo el honor de ser el más rápido del mundo en su momento. En 2007, un 365 California fue llevado a la subasta de Gooding & Company celebrada en Pebble Beach, CA. Se vendió por 1.375.000 dólares.
Ginés de los Reyes
Desde que tengo conciencia me llamó la atención cualquier cosa con ruedas. Aprendí a montar en bicicleta al mismo tiempo que a andar, y creo que la genética tiene algo que ver: mi padre adoraba los coches, les ponía nombres, mi abuelo conducía y participaba en el diseño de camiones, y le privaban los coches...Ferris Buler ¡¡¡¡
Si no recuerdo mal, el de Ferris Bueller era el Ferrari 250 GT California Spyder: