Ha llegado la fecha. Wörthersee vuelve una vez más, y eso solo puede significar una cosa: nuevos Volkswagen Golf modificados para la ocasión. Este año los aprendices de Wolfsburg y Zwickau presentaron no uno, sino dos diseños, basados en el Golf GTI de tres puertas y en el Golf R familiar (Variant) respectivamente. ¿El objetivo? Mostrar desde su perspectiva individual el futuro de ambos modelos.
El coche de los chicos de Wolfsburg, bautizado como Volkswagen Golf GTI Aurora, extrae 380 CV de su bloque turboalimentado de 2 litros que quedan asociados a una caja de cambios automática DSG de siete velocidades. Acabado en una pintura Nardo Grey y Deep Black Pearl Effect con exclusivos detalles en verde menta, también cuenta con un kit de carrocería con detalles pintados a mano.
Como puede esperarse de un automóvil diseñado casi en su totalidad por millennials, el GTI Aurora no escatima en tecnología. Se han montado pantallas adicionales en la consola central para comunicar datos del motor y del coche en general, información que también se transmite al pasajero a través de una tablet. Desde este artilugio también se puede controlar el sistema de sonido de 3.500 vatios.
Pero eso no es todo. Por primera vez en el mundo, este vehículo conceptual también cuenta con un módulo holográfico montado en el maletero, una tecnología que Volkswagen Group Components afirma haber estado perfeccionando durante meses. No requiere de ningún tipo de gafas 3D, y dispone de controles flotantes que pueden usarse para operar el equipo de sonido.
El segundo coche es el producto de los aprendices de Volkswagen Sajonia en Zwickau, Chemnitz y Dresden. Viene en formato de familiar, pero de un familiar muy, muy rápido. Con 400 CV bajo el capó, e igualmente asociado a la transmisión automática de doble embrague DSG, se presenta el Volkswagen Golf Estate R FighteR. Es 6 cm más ancho que el modelo estándar gracias a unas aletas más amplias.
Pero no sólo se trata de un showcar. Es un coche plenamente funcional que asumirá los deberes de un coche de seguridad en los eventos de competición del circuito de Sachsenring. Para ese fin, cuenta con un sistema de luces en el techo y estroboscópicas montadas en la parrilla delantera. Un trabajo de pintura Crystal Silver y Nardo Grey con Misano Red y Piano Black completa la apariencia intencionada.
Aunque no hay hologramas a bordo, el Golf Estate R FighteR también equipa una cámara de 360 grados montada en el techo y cuyas imágenes se pueden ver en el habitáculo con una gafas VR integradas. En el interior, un forro de cuero completo se extiende desde los asientos hasta el maletero, adornado con costuras decorativas rojas e incrustaciones de Alcántara. Por supuesto, tampoco falta un sistema de sonido personalizado.
Por lo tanto, tenemos un coche de seguridad funcional y un compacto de altísimas prestaciones cargados de tecnología en Wörthersee, ambos ganándose sus propios méritos. En cuanto a la pregunta de cuándo veremos un Volkswagen Golf GTI equipado con hologramas o un Golf R de 400 CV en los concesionarios… no parece que vayamos a obtener una respuesta complaciente.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS