Este año en el que Lamborghini celebra su sexagésimo aniversario, también supone un momento de cambio. El Lamborghini Revuelto, presentado recientemente, sustituyó al Lamborghini Aventador con una propuesta electrificada, aunque no renuncia a la configuración de doce cilindros en uve —y atmosférico— para su propulsor de combustión. El próximo en llegar será el sucesor del Lamborghini Huracán, un nuevo baby Lambo que también adoptará un tren de potencia híbrido.
Las imágenes de uno de los prototipos del modelo, obtenidas por el youtuber Acriore, en los alrededores de las instalaciones de la marca italiana en Sant’Agata Bolognese, nos permiten inferir algunas de las características que definirán al próximo deportivo pequeño de los transalpinos. Por ejemplo, y pese a su profuso camuflaje, es evidente el sucesor del Lamborghini Huracán exhibirá una imagen inspirada en la de su hermano mayor, el Lamborghini Revuelto.
La relativa escasez de aberturas en su carrocería, junto con el especialmente grave rumor de su motor cuando lo vemos circular en el vídeo, parecen confirmar algo que ya sabíamos, que el V10 atmosférico ha pasado a mejor vida en el catálogo de los transalpinos. Como os contábamos hace ya meses, las instalaciones donde se venía fabricando este motor —la alemana de Necharsulm y la húngara de Györ— experimentan en la actualidad una completa transformación en centros de producción de vehículos eléctricos del Grupo Volkswagen.
No se trata tan solo de una moda, como sabemos. Las normas anticontaminación son cada vez más estrictas, e imponen limitaciones sobre las cifras de emisiones medias de las gamas de los fabricantes. Lamborghini adoptará, por tanto, una configuración que favorezca reducir la incidencia de sus productos sobre los guarismos medios de todo el grupo. El V8 sobrealimentado, seguramente con doble turbo, formará parte de un tren de propulsión híbrido enchufable que, quizá, se servirá de un planteamiento similar al de tres motores eléctricos del Lamborghini Revuelto, aunque, no cabe duda, con prestaciones más modestas que los 1.015 CV anunciados para aquel.
Lamborghini, como tantos otros, sigue el rumbo de reducción de número de cilindros, y de capacidad total, del propulsor de su baby Lambo con este nuevo modelo, retomando una configuración que no se veía desde el Lamborghini Jalpa. Quizá este modelo, como aquel y como el Lamborghini Revuelto, instale también su motor de combustión transversalmente tras el habitáculo. En cualquier caso, atrás queda una fórmula, la del V10 atmosférico, que, inaugurada con el Lamborghini Gallardo de 2003, ha sido tan representativa como el V12 en su buque insignia y, hasta cierto punto, más explicativa del éxito comercial de Lamborghini en estas últimas décadas, al menos hasta la llegada de su SUV, el Lamborghini Urus.
No obstante, han pasado más de dos décadas desde entonces, y las posibilidades, en términos de rendimiento, que ofrece un V8 en la actualidad, especialmente con el apoyo de una máquina eléctrica, son incomparables. Los McLaren Artura y Ferrari 296 GTB han demostrado que seis cilindros bastan para superar las prestaciones de sus predecesores. Falta todavía un año para que se produzca la presentación de este modelo, que completará una gama totalmente electrificada en Sant’Agata Bolognese.
David García
No conozco sensación mejor que la de un volante en las manos. Disfruto también con ellas sobre el teclado, escribiendo ahora para vosotros algo parecido a aquello que yo buscaba en los quioscos cuando era un guaje.COMENTARIOS