Durante algunos años de los que posiblemente muchos se acuerden, los monovolúmenes eran el presente y el futuro del automóvil. Diseños de un solo trazo se comenzaron a ver en todos los segmentos y todas las marcas “para las masas” llegaron a ofrecer un monovolumen en algún momento. De hecho, incluso Mercedes y BMW tuvieron en su catálogo vehículos monovolumen, tanto por diseño como por categoría. Era una locura, todo era monovolumen, incluso se llegaron a presentar prototipo de deportivos monovolumen, aunque no llegó tan lejos como ha ocurrido con los SUV.
El tema de los SUV es digno de estudio, pues en realidad, como ya se ha comentado cientos de veces, no ofrecen, realmente, mucho adicional frente a un turismo convencional, algo que sí ofrecían los monovolumen en forma de espacio y de versatilidad interior, pues los había con habitáculos que se podían configurar de varias formas. No era lo normal, pero por lo general, si eran coches más adecuados para familias. Lo más curioso es que solo hubo dos marcas que se atrevieron a ofrecer versiones deportivas de monovolúmenes: SEAT con el Altea FR y Opel con el Zafira OPC. Destacaba especialmente este último, con un planteamiento bastante radical para el coche que era, así como unas prestaciones casi de coche deportivo.
Opel presentó el Zafira OPC en 1999 y estaba equipado con el motor 2.0 turbo del Opel Astra Coupé Turbo, es decir, presumía de 192 CV. Pero no solo eso, por potencia los había más potentes, lo más sorprendente era su talante deportivo. No había nada como ese coche en el mercado, hasta que SEAT presentó el Altea FR y a los alemanes se les ocurrió lanzar la segunda generación del Opel Zafira OPC en el año 2005, y en esta ocasión, fueron todavía un poquito más lejos para convertir al modelo en una opción única en el segmento y en el mercado, pues nadie se atrevió a replicar.
Para la segunda entrega del Zafira OPC; en Opel decidieron que el motor del Astra OPC era una buenísima opción. Hablamos de un bloque de cuatro cilindros, 1.998 centímetros cúbicos, turbo e intercooler, inyección directa y una potencia de 177 kW –240 CV– a 5.600 revoluciones y 320 Nm entre 2.400 y 5.000 revoluciones. El cambio era manual de seis relaciones y la potencia llegaba a las ruedas delanteras. Podía hacer el 0 a 100 km/h en 7,8 segundos, el 0 a 200 km/h en 31,8 segundos, los 400 metros con salida parada los completaba en 15,6 segundos y el kilómetro también con salida parada en 28,4 segundos. La velocidad máxima era de 227 km/h.
Estéticamente seguía la línea de todos los modelos Opel Performance Center y entre otras cosas, destacaba por las llantas de 19 pulgadas y por los dos terminales de escape bajo el paragolpes trasero. Por supuesto, había nuevos elementos aerodinámicos tanto delante como detrás y se podía pedir en el característico azul de Opel OPC. También se dieron retoques al chasis, como cabría esperar. La suspensión, además de más firme –amortiguadores específicos y casquillos diferentes–, era 15 milímetros más corta y la dirección también se calibró especialmente para la ocasión. Los frenos se tomaron del Astra OPC, con discos delanteros de 321 milímetros.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".Hay fallos de escritura en el articulo, en vez de monovolumen poneis suv.
El tema de los SUV es digno de estudio, pues en realidad, como ya se ha comentado cientos de veces, no ofrecen, realmente, mucho adicional frente a un turismo convencional, algo que sí ofrecían los SUV en forma de espacio y de versatilidad interior, pues los había con habitáculos que se podían configurar de varias formas.
El coche es un sleeper, muy exotico.
Muy buenas. Gracias por el aviso. Cambiado.