Presentado casi seis décadas, por delante de otros deportivos populares como el Jaguar E-Type o el Ford Mustang, el Volvo P1800 es conocido su elegancia atemporal, y entró en el salón de la fama de la fiabilidad con un recuento de rodaje certificado por Guinness de más de cinco millones de kilómetros. Cyan Racing, el departamento de competición del fabricante sueco y de Geely Group Motorsport, presentó a principios de septiembre el Volvo P1800 Cyan, un restomod que mezcla lo mejor del pasado y del presente.
Al igual que la carrocería, que se ha ensanchado y actualizado levemente, el interior no es una réplica exacta del original. Para Cyan es una interpretación, pero hay varias señales que evocan el diseño creado por Carrozzeria Ghia en 1961. Por un lado, el cuadro de instrumentos cuenta con un tacómetro y un velocímetro con el fondo azul e indicadores de la temperatura del agua y del aceite. Tres diales auxiliares a la derecha del módulo principal hacen lo propio con el nivel de combustible, la presión de aceite y marcando la hora, como el modelo original.
Tampoco falta una jaula antivuelco de titanio revestida de cuero, asientos buquet, arneses de competición, un sencillo volante firmado por Momo de tres radios y un pomo para el cambio de marchas de aspecto vintage. “Nos hemos centrado en crear un interior que refleje la decoración del coche de los años 60 en una versión moderna. Hemos mantenido el interior limpio y orientado al conductor del modelo original, moviéndolo cuidadosamente hacia adelante con materiales y tecnología moderna”, dijo Ola Granlund, jefe de diseño de Cyan Racing.
En 1961, el Volvo P1800 comenzó su vida como un coupé 2+2 de propulsión con un motor de cuatro cilindros de 1,8 litros y 104 CV conectado a una transmisión manual de cuatro relaciones
El P1800 de Cyan usa un motor del Volvo S60, pero no de cualquier S60, sino un bloque de cuatro cilindros turboalimentado de 2 litros que proviene directamente del modelo de competición S60 TC1, ganador del título mundial de Campeonato Mundial de Turismos. Produce 420 CV a 7.000 RPM y 455 Nm de par a 6.000 RPM, con la línea roja en las 7.700 RPM. La potencia se envía a las ruedas traseras a través de una caja de cambios Holinger de cinco velocidades a medida. Y aun con turbo, la compañía declara que ofrece las características de un motor atmosférico.
“El motor está diseñado para girar a altas revoluciones, con el par intuitivamente lineal al pedal. Hemos aprendido de las carreras en las que los conductores quieren un control perfecto del par, aumentando la precisión y el placer de conducir al mismo tiempo”, dijo Mattias Evensson, jefe de ingeniería de la compañía. “Otra área de atención es el diseño del motor y el compartimiento de este. Hemos hecho un esfuerzo por destacar el ligero motor Volvo VEA, liberado de todos los elementos de los motores modernos, con claros vínculos con el Volvo P1800 original de los 60”.
Cyan declara que su objetivo no era llevar la modernidad a una carrocería clásica, sino también proporcionar una experiencia de conducción analógica. Por lo tanto, este P1800 no tiene ABS o control de tracción. Sin embargo, la cremallera de dirección ha sido actualizada con una caja de piñón y cremallera, así como la suspensión, ahora con brazos de aluminio y una configuración independiente diseñada internamente en Gotemburgo. Dado el éxito de sus coches de carreras, ese diseño estará ciertamente a años luz del viejo eje rígido que traía el coche de fábrica.
Al igual que otros proyectos de restauración de fábrica, el Cyan P1800 debería conducirse como un coche antiguo que se ha mejorado con componentes nuevos. “La suspensión es totalmente ajustable y se puede configurar de la forma que desee el cliente, ya sea un vehículo más centrado en la pista o uno que se utilizará principalmente para disfrutar de sus carreteras favoritas en la montaña o, simplemente, para visitar a su barista local”, añadió Evensson. Si deseas pedir uno, Cyan planea construir un número muy bajo por alrededor de medio millón de euros cada uno.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS