El Honda Integra, también comercializado con la insignia Acura al otro lado del charco, fue un modelo derivado del Civic fabricado a partir de 1986 a lo largo de cuatro generaciones. Sin duda alguna, quizá la más reconocida es la penúltima caja (DC2) con el sello Type R. Su manejo era ejemplar y su mecánica podía disfrutarse a un régimen cercano a las 10.000 RPM. Una verdadera maravilla de la ingeniería que tuvo su final en 2006. Y difícilmente habrá un sustituto, pero ¿te lo imaginas?
Como tal, algunos pueden argumentar que el Civic Si Coupé vendido en Norteamérica ha sido el encargado de cubrir ese papel. Aun así, no hay un Civic Si Coupé Type R disponible, y eso puede ser un fastidio para aquellos enamorados de los dos puertas noventeros. De todos modos, si eres una de esas personas amantes del Integra, probablemente te sentirás mejor después de ver estas recreaciones digitales independientes que representan un hipotético nuevo modelo, incluido un derivado Type R de altas prestaciones.
Jordan Rubinstein-Towler ha sido el creador de este supuesto Integra 2021. Su diseño agresivo, especialmente notorio en la versión más deportiva, se ha formado sobre una carrocería de tamaño compacto. Eso es porque los renders representan un modelo de producción de Honda, lo que significa que estaría destinado al mercado europeo o al nacional. Pero aun sumiendo que estamos hablando de un modelo digitalizado, la mayoría de sus características de diseño podrían trasladarse sin mucho problema a un coche real.
En cuanto al motor, podemos ver que se trata de una unidad de cuatro cilindros con la tecnología VTEC de la compañía, por lo que podría tratarse de la unidad turboalimentada del Type R con algún tipo de electrificación
Como ejercicio de diseño, estas representaciones son difíciles de criticar, especialmente las de las versiones más mundanas que parecen listas para llegar a los concesionarios, mientras que el Type R parece un poco más futurista y conceptual. Ambos vehículos presentan las influencias de estilo de las alineaciones actuales de Honda, pero con todo logran lucir frescas. Quizá la única pega la podemos ver en la vista trasera, que parece demasiado alta y voluminosa para un coupé deportivo, sobre todo al compararla con la del DC2.
El autor eligió un diseño limpio con superficies en su mayoría redondeadas, y solo unos pocos pliegues que rompen la forma orgánica general, especialmente las dos tablillas verticales a cada lado de los faros. El modelo también cuenta con cámaras en lugar de espejos laterales, algo que Honda ya ha hecho con su pequeño hatchback eléctrico, el e. El Integra Type-R que vemos aquí, probablemente, no se acercará al modelo real que podríamos ver el próximo año bajo el nombre Civic, pero no me importaría que se pareciera a este prototipo.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.El Type R mola mucho (a pesar de ser de photoshop), aún así yo me conformaba con una versión normal y el 1.5 de 180CV
Pues como posibilidad no es descabellada, además sabiendo que el Honda Integra (scooter) desaparece para llamarse Forza 750. No habría conflicto con el nombre.
Eso es cierto, aunque espero que este no sea el diseño (en mi opinión es bastante feo).
Rotundamente yo espero que tampoco. Aceptamos que Honda haga coches “rarunos” y no clónicos como otros fabricantes, pero no tanto. Por otro lado, si es un coche destinado al mercado americano, seguro que no será de líneas al gusto europeo.