Este pequeño deportivo italiano, el Alfa Romeo Giulietta Sprint Speciale (o SS a secas) era un pequeño deportivo italiano fabricado por Alfa Romeo entre 1959 y 1966. Fue diseñado por Franco Scaglione, que trabajaba en el estudio de diseño de Bertone. Este coupé biplaza de dos puertas llevaba arquitectura mecánica tradicional con motor delantero y propulsión trasera.
El modelo Giulietta en general se consideró como el símbolo del renacimiento de la economía italiana, casi como un milagro, uniendo las prestaciones con su facilidad de mantenimiento y su uso cotidiano
Curiosamente, la primera configuración de carrocería que se ofreció fue la coupé -o Sprint, como la llamaba Alfa Romeo- y después la berlina/sedán de cuatro puertas, al revés de lo que solía ser habitual. Tenía las dimensiones medias de los pequeños coupés biplazas de la época, con 4.120 mm de largo, 1.660 mm de ancho y 1.245 mm de alto, con un valor en báscula homologado de 860 kg, un verdadero peso pluma. Se produjeron un total de 1.366 unidades y utilizó como base de partida la plataforma del Giulietta Spider.
El primer prototipo de Giulietta SS se presentó en el Salón de Turín de 1957, mientras que el segundo fue exhibido en el Salón de Ginebra de 1958 y presentaba una carrocería íntegramente de aluminio. Su diseño aerodinámico estaba muy estudiado, con un valor de Cx de 0,28. Una notable característica era la ausencia de la tradicional parrilla de Alfa Romeo que aparecería posteriormente en los coches de producción, así como unos voladizos muy dimensionados.
El modelo definitivo de producción se presentó en el circuito de Monza el 24 de junio de 1959. Se produjeron dos versiones diferentes del Alfa Romeo Giulia Sprint Speciale. La primera se conocía internamente como Tipo 750 SS, y la segunda como Tipo 101.20. La mayoría de las unidades de la primera versión se fabricaron con el chasis y carrocería en acero, aunque con algunos elementos en aluminio, como las puertas, el capó y el portón del maletero.
Su ligereza de peso gracias al uso del aluminio en algunas partes de su carrocería y su extraordinaria aerodinámica, con un Cx de 0,28 que le otorgaba unas prestaciones de primera
Las primeras 101 unidades del Tipo 750 SS se les conocía como los de la “nariz baja” por la línea descendente del capó hasta un frontal bajo y afilado en forma de nariz, de ahí su apodo. Las ventanillas laterales estaban fabricadas en plexiglás y no incorporaba paragolpes. Resultaba muy ruidoso al carecer de ningún tipo de aislamiento acústico. Al haber superado las 100 unidades podía ser homologado por la FIA para poder participar en competiciones.
A nivel mecánico incorporaban el motor conocido como Alfa Romeo Twin Cam, con dos cámaras de combustión gemelas hemisféricas y dos árboles de levas situados en cabeza (DOHC). Sus cuatro cilindros cubicaban 1.290 cm3 y estaban alimentados por un carburador Weber 40 DCO3, sustituidos posteriormente por un Weber 40 DCOE2.
Pasamos al Giulietta Sprint Speciale Tipo 101.20 -la versión definitiva del Giulietta SS-, que simplemente era un 750 SS con algunas modificaciones, como la sustitución de las puertas de aluminio por otras de acero e incorporando ya de serie el carburador Weber 40 DCOE2. Se cambió el diseño de su “nariz baja” por otro de “nariz alta” y se sustituyeron las ventanillas de plexiglás por otras convencionales de cristal; también se le añadieron paragolpes de acero cromado. Se le incorporó algo de aislamiento acústico sin apenas notar su efecto.
El motor era una joya tecnológica en su momento, diseñado para ser indestructible
Su motor 1.3 entregaba una potencia de 100 CV -aproximadamente- y empujaba su elegante aerodinámica carrocería hasta los 200 km/h, sobresaliente para un motor de esta cilindrada y sorprendente por su capacidad de retención. Tanto el motor como la caja de cambios manual de cinco velocidades eran los mismos que los que utilizaba el Giulietta Sprint Zagato o SZ (recordamos el rescate de una unidad olvidada en un sótano), versión orientada a la competición.
Este motor era una joya tecnológica en su momento y accesible para el público en general, no solo reservado para bolsillos pudientes. El bloque y la culata estaban hechos en fundición de aluminio y las camisas eran de tipo húmedo fabricadas en hierro fundido, pudiendo sustituirse en caso de necesidad. Sus dos árboles de levas estaban accionados por cadena y movían a las ocho válvulas de sus cuatro cilindros.
El cárter contaba con una capacidad bastante superior a lo que cabría esperar por su pequeña cilindrada para permitir funcionar a alto régimen durante un tiempo elevado sin sufrir riesgo de calentamiento. Estaba claro que Alfa Romeo quería construir un motor indestructible.
Su corta batalla le confería una gran agilidad en carretera. El equipo de frenos era de tambores en las cuatro ruedas, con la particularidad de llevar tres zapatas en los delanteros y una en los traseros; eran de un tamaño generoso y resultaban bastante eficaces para ser tambores.
Tenía un hermano casi gemelo, el Giulia SS. Se distinguían con facilidad si echábamos un vistazo al tablero de instrumentos, siendo menos inclinado y con la parte inferior forrada en cuero, con una guantera en un sitio diferente en el caso del Giulia SS. Precisamente el Giulia SS sustituyó al Giulietta SS en 1962, permaneciendo en producción hasta 1965.
Calcula cuánto cuesta asegurar un Alfa Romeo Giulietta con nuestro comparador de seguros.
Ginés de los Reyes
Desde que tengo conciencia me llamó la atención cualquier cosa con ruedas. Aprendí a montar en bicicleta al mismo tiempo que a andar, y creo que la genética tiene algo que ver: mi padre adoraba los coches, les ponía nombres, mi abuelo conducía y participaba en el diseño de camiones, y le privaban los coches...No me cansaré de decir, q esta es la Alfa Romeo q echamos todos de menos…