Con motivo del Salón del Automóvil de Frankfurt 2019, la subsidiaria checa del Grupo Volkswagen traerá el Škoda Scala Monte Carlo. Aquellos que no estén familiarizados con la nomenclatura de los coches de la flecha alada pueden pensar que se trata de una vertiente más prestacional del compacto de Škoda, pero no es el caso.

La denominación Monte Carlo, como bien habrás podido imaginar, está referida al distrito urbano del Principado de Mónaco y su histórico trazado. Celebrado por primera vez en 1911, el Rally de Montecarlo es el de mayor tradición de todos los eventos que forman parte del actual Campeonato Mundial de Rally (WRC), y el lugar en el que Škoda ha logrado algunos de sus mayores logros deportivos.

Por ejemplo, en 1936, el Škoda Popular Sport quedó en el segundo lugar de su categoría, mientras que en 1977 el 130 RS ocupó la primera y segunda posición de su categoría. Las versiones de rally del Škoda Fabia también han cosechado numerosos éxitos en esta carrera. El Škoda Scala Monte Carlo hace referencia a esta tradición en el mundo del motor de competición, recordando vehículos y triunfos legendarios.

El Škoda Scala Monte Carlo no añade ningún plus de potencia al grupo propulsor ni modifica la suspensión en pro de mejorar el paso por curva, tan solo encontramos modificaciones estéticas. “Con la nueva variante Monte Carlo hemos puesto un énfasis aún mayor en el carácter deportivo y dinámico del Škoda Scala”, afirma Olivier Stefani, responsable de diseño de la marca. Esta edición está “específicamente diseñada para un público joven que aprecia la deportividad”.

En el exterior, se puede ver que es un Scala que destaca por los detalles de color negro, apreciables en los faros LED y en la parrilla delantera. Una historia similar vemos en la parte posterior, donde las letras de “Škoda” y “Scala” están terminadas en negro, así como la carcasa de los espejos retrovisores. Las llantas de aleación de 17 pulgadas u opcionales de 18 son también exclusivas de esta versión.

El diseño interior del Škoda Scala Monte Carlo cuenta con algunos detalles en rojo, un volante multifunción, pomo del cambio y palanca de freno de mano envueltos en cuero, forro del techo negro, iluminación ambiental LED, aspecto cromado para las toberas de ventilación, la denominación “Scala” en los umbrales de las puertas y alfombrillas exclusivas. Las ventanillas tintadas y el techo panorámico también forman parte del equipamiento.

Actualmente, el Škoda Scala más potente queda conformado por el bloque 1.5 TSI EVO de 150 CV, asociado únicamente al cambio automático DSG

Škoda no se ha pronunciado acerca de aportar el tratamiento Laurin & Klement -el más lujoso- a su Scala, y es dudoso que acabe llegando. Es por ello por lo que el nuevo acabado Monte Carlo se situará en la cima de la gama aportando un plus de deportividad y dinamismo mientras esperamos a una posible versión con el apellido RS. No es descabellado pensar en un Scala con el motor 2.0 TSI del Volkswagen Polo GTI y una puesta a punto capaz de lidiar con 200 CV.

Al igual que el resto de la línea Scala, el nuevo Monte Carlo también estará disponible con una completa gama de motores. Las entregas comenzarán en el cuarto trimestre del año, después del estreno mundial que tendrá lugar en el Salón del Automóvil de Frankfurt de 2019, el cual abrirá sus puertas el próximo día 12 de septiembre. Allí también se presentará el Škoda Kamiq Monte Carlo.