Mansory nos tiene acostumbrado a sus preparaciones sobre coches de lujo, y la corriente actual de jóvenes millonarios, sí, esa minúscula minoría tan presente, ha provocado que el preparador tienda a una imagen más oscura, e incluso deportiva. Esto les ha llevado a crear el Rolls-Royce Phantom de Mansory, o mocasines para correr, algo que no acaba de encajar en su horma. Entre sus materiales está el carbono forjado, algo que no se acaba de entender en un coche que sobrepasa los 2.500 kg.
Si echamos la vista atrás, algo tan mundano como un Megane RS (al lado del Rolls-Royce el 95% de los coches lo son) sacaba una edición aligerada y limitada que equipaba, ojo, el capó de fibra de carbono. Sí, hablo del R26.R, y en plena lucha de los compactos por conseguir el mejor tiempo en el conocido trazado de Nürburgring, tenía sentido. Pero creo que la fibra de carbono no se está utilizando del todo bien en algunas aplicaciones, esta es una de ellas.
Fabricar de fibra de carbono forjada aditamentos aerodinámicos para un coche de más de 2.500 kg no suena más coherente, y mucho menos cuando sabemos que está orientado al lujo. Tan estúpido como correr con mocasines, El preparador alemán Mansory ha preparado el Rolls-Royce Phantom, debido al lavado de cara del año pasado del buque insignia de lujo, los impulsó a presentar una nueva versión. El Rolls-Royse Phantom Pulse Edition tiene un llamativo kit de carrocería con detalles en carbono forjado y monta un nuevo juego de llantas de aleación de 24 pulgadas.
La Pulse Edition se beneficia de los nuevos faros LED y la parrilla ligeramente rediseñada del Phantom renovado, aunque solo unas pocas personas podrán notar la diferencia con su predecesor. El kit de carrocería personalizado parece no haber cambiado, incluidas las tomas de aire más grandes, los faros de luz diurna adicionales y el lip en la parte delantera. El capó de carbono forjado se combina con un acabado negro en las branquias laterales, los faldones laterales, el alerón en la tapa del maletero y el difusor trasero que alberga las salidas del sistema de escape deportivo.
Las llantas negras FD.15 totalmente forjadas de 24 pulgadas de diámetro llenan completamente los pasos de rueda, en parte gracias a la suspensión neumática más baja. Sorprendentemente, el interior ha seguido el camino del lujo, está personalizado con tapicería de cuero blanco con las letras Mansory grabadas en los reposacabezas acolchados. Los detalles en negro piano en el tablero y las alfombrillas y tapetes negros crean un fuerte contraste, al igual que el acabado de carbono forjado expuesto en los estribos laterales.
Para aquellos que prefieren un exterior más discreto y un interior más llamativo, Mansory produjo una especificación alternativa de Pulse Edition. Este está pintado en Black Diamond, con llantas a juego, detalles oscurecidos y discretos detalles en azul claro, incluidas las finas rayas en el perfil. El interior, por otro lado, está completamente cubierto con una tapicería de color azul claro, con detalles en naranja contrastantes que originan una combinación bastante inusual.
El motor V12 biturbo de 6,75 litros de Rolls-Royce produce 571 CV y 900 Nm de par motor directamente de fábrica, lo que es más que suficiente para mover su peso de forma relativamente ágil. Sin embargo, Mansory ha aumentado esas cifras a 610 CV y 950 Nm, si el cliente necesita un rendimiento extra, claro. El motor también tiene una cubierta de fibra de carbono, por lo que incluso el mecánico que trabajará en el Phantom preparado quedará impresionado y temerá mancharlo de aceite.
El preparador no reveló el precio del dúo de modelos Rolls-Royce Phantom Pulse Edition, pero a juzgar por versiones similares anteriores, deberían costar cerca de 1 millón de dólares cada uno. Si se va a utilizar un material directamente traído del mundo de las carreras, ¿por qué no replicar el Rolls-Royce Corniche que corrió en el Dakar? En aquel caso iba camuflado, pero la corriente del Porsche 911 Dakar y el Lamborghini Huracán Sterrato quizá sea más acorde con la historia de la marca, aunque renegasen de ello.
Francisco Javier Rodriguez
En la época en la que pasaba el día dibujando coches, alguien me preguntó: ¿pero a ti te gusta más la mecánica o la carrocería de los coches? Esa misma semana leí el Manual del Automóvil de Arias Paz. Tenía 14 años, esa simple pregunta es la razón por la que estoy aquí, desde entonces no he parado de aprender sobre lo que se convirtió en mi pasión.COMENTARIOS