Con el Porsche 914, la firma de Stuttgart se convirtió en 1969 en el primer fabricante alemán en llevar al mercado un deportivo de producción en serie con motor central. Para celebrar su 50 aniversario, el Museo Porsche ha invitado a todos los fans de este biplaza al “Typically Porsche Day”, que tendrá lugar el domingo 2 de junio con más de 120 propietarios del modelo presentes.
Además de una gran variedad de actividades, los visitantes del “Día Típicamente Porsche” también podrán disfrutar de compartir opiniones con expertos del 914. Entidades como, por ejemplo, el antiguo ingeniero de desarrollo y carreras Roland Kussmaul o los ingenieros y pilotos Hans Clausecker y Günter Steckkönig, quienes repasarán los momentos legendarios del Porsche 914.
Anthony Hatter, responsable de calidad de diseño en Porsche, el ex ingeniero de desarrollo, Jürgen Kapfer y el desarrollador de producto para coches de competición Hermann-Josef Steinmetz, analizarán las raíces y, sobre todo, el futuro del concepto de motor central en Porsche, tratando de responder al por qué esta configuración, diseño, tecnología y estilo de vida que son hoy típicamente Porsche.
Las doce unidades del Porsche 914 que se exhibirán en la exposición cubrirán un amplio abanico y las creaciones que inspiró
Estarán incluidos los modelos de producción 914/4 y 914/6, con el motor Volkswagen de cuatro cilindros y el Porsche de seis cilindros, respectivamente. También se podrá ver el primer 914 construido y uno de los dos prototipos Porsche con motor de ocho cilindros de competición.
Otro de los coches que se mostrará es el 914/6 GT. Se concibió en 1972 para que la ONS (Obersten Nationalen Sportbehörde o Máxima Autoridad del Deporte Nacional) lo utilizara como el primer safety car del mundo, y estaba equipado con novedosos sistemas de seguridad. Entre ellos, un sistema de extinción de incendios. Además, se va a poder ver un proyecto de reconstrucción de iniciativa privada, que incorpora un motor V8 de 350 caballos del 928 GTS para un 916.
La entrada a la exposición será gratuita desde el próximo 2 de junio y permanecerá en activo en el Museo Porsche hasta el 7 de julio
Y ahora que ya sabemos qué vamos a poder ver en el susodicho lugar y cuándo, toca echar la vista atrás para hacer repaso de cómo este pequeño deportivo alemán fue concebido.
A mediados de los 60, Porsche trataba de expandir su posición en el mercado con un deportivo que se situara por debajo del 911. Sin embargo, un proyecto así no era viable para que lo llevara en solitario una empresa pequeña. Porsche encontró un socio en Volkswagen, que en aquel tiempo buscaba un sucesor para su ya anticuado deportivo coupé el Type 34, más conocido como Karmann Ghia.
Ferry Porsche y el director de Volkswagen por entonces, Heinrich Nordhoff, se unieron para ejecutar el proyecto. Cuando Nordhoff falleció repentinamente en 1968, la idea estuvo a punto de ser desechada. Pero Ferry Porsche trabajó en una solución con el nuevo director general de Volkswagen, Kurt Lotz. Consistió en que ambas empresas establecerían la sociedad de ventas, naciendo así VW-Porsche.
El producto se comercializó en el mercado europeo como VW-Porsche 914, disponible en dos versiones: el 914 “a secas” con motor de cuatro cilindros de origen Volkswagen, y el 914/6 con un propulsor Porsche de seis cilindros. En el mercado estadounidense ambas variantes se vendieron bajo la marca Porsche.
Con un peso en vacío de 900 kg o de 940 kg en la versión de seis cilindros, el 914 lograba una excepcional relación peso/potencia
La más modesta de las mecánicas era de nuevo diseño y fue la primera con inyección ofrecida por la marca. Este motor de 1,7 litros desarrollaba 80 CV a 4.900 RPM, para acelerar de 0 a 100 km/h en 13 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 177 km/h. En contraste, el motor Porsche de seis cilindros provenía del 911 T y estaba diseñado para lograr las mejores prestaciones, con árboles de levas en cabeza, carburadores triples y encendido de condensador de alto rendimiento. Un 2,0 bóxer que rendía 110 CV a 5.800 RPM.
Por último, pero no menos importante, hubo dos unidades de un modelo especial que ayudó a cimentar la extraordinaria reputación de este biplaza: el 914 S con ocho cilindros y 3,0 litros de cilindrada. Procedente del Porsche 908 de competición con sistema de inyección, el primer vehículo que se produjo tenía unos 300 CV. Fue entregado a Ferdinand Piëch, el responsable de desarrollo en aquella época, como coche de pruebas.
En la segunda unidad, el motor daba 260 CV. Fue un vehículo matriculado para poder circular por carretera y fue a parar a las manos de Ferry Porsche como regalo por su 60 cumpleaños.
Ambos 914 S tenían una velocidad máxima cercana a los 250 km/h y, en 1971, sirvieron de base para una corta serie de modelos 914 de altas prestaciones
El distinguido biplaza con su característico techo de tipo targa estaba dirigido principalmente a jóvenes compradores. Con un precio básico inicial de 11.955 marcos (unos 22.000 euros al cambio de 2019), el Porsche 914 se convirtió en un auténtico éxito de ventas. Entre 1969 y 1975 se fabricaron 115.631 unidades del 914 de cuatro cilindros. La mayoría de ellos se exportaron a Estados Unidos, donde fue elegido “Coche Importado del Año” en 1970. En contraste, el 914/6 fue un purasangre más exclusivo, del que se produjeron 3.338 unidades entre 1969 y 1972.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS