Los SUV son automóviles omnipresentes en nuestras carreteras a día de hoy. Sin embargo, desde hace tiempo venimos leyendo algunas informaciones que señalan que la hegemonía de los SUV en el mercado del automóvil actual puede estar amenazada. Aquí ya os hablamos de cómo, durante los primeros meses de 2023, el mercado estadounidense había registrado un número mayor de ventas en los segmentos sedán y compacto, lo cual demuestra un cambio de tendencia. Desde Automotive News se señalaba entonces que este tipo de carrocerías podrían estar enfrentándose en la actualidad a una especie de ocaso provocado por su propio éxito. Al parecer, ahora los consumidores buscan diferenciarse al adquirir modelos que no tengan aspecto de todocamino.

Este cambio de tendencia por parte de los consumidores estaría acompañado también de un giro en los objetivos perseguidos por los fabricantes con sus modelos, motivado por la electromovilidad. En este sentido, también aquí os contábamos hace unas semanas que Vincent Cobée, director ejecutivo de Citroën, señalaba que este formato de carrocería conlleva unos condicionantes aerodinámicos que no son del todo compatibles con la búsqueda de eficiencia asociada a cualquier vehículo eléctrico. La marca francesa ha puesto en práctica formatos de carrocería novedosos en los últimos tiempos, que mezclan los rasgos básicos de las berlinas y los crossover, como es el caso del Citroën C5 X, en parte para tratar de solventar esta problemática.

Ahora bien, la electromovilidad no estaría detrás de la caída en desgracia de estas carrocerías solo como un límite, relacionado con esta búsqueda de mayor eficiencia aerodinámica y, por tanto, mayor autonomía, sino también desde su condición de oportunidad. Si muchos de los compradores de este tipo de automóviles basan su decisión en la practicidad que ofrecen los SUV, en cuanto a espacio interior y volumen de carga disponible, los beneficios de las plataformas eléctricas en este sentido también podrían suponer que no hiciera falta construir automóviles tan grandes para contar con la misma capacidad.

Según afirma Karim Habib, diseñador jefe de Kia, la eliminación de los túneles de transmisión asociada a los vehículos eléctricos, así como la menor cantidad de elementos que requieren sus mecánicas, puede provocar que ya no sea necesario recurrir a las carrocerías SUV para ofrecer un amplio espacio en el interior de un automóvil y, con ello, que termine por disminuir su popularidad

Ha sido Karim Habib, diseñador jefe de Kia en la actualidad, quien ha manifestado sus dudas acerca de la supervivencia de este tipo de automóviles en el mercado. El directivo canadiense, en cuya trayectoria profesional ha formado parte de los equipos creativos de fabricantes como BMW, Mercedes-Benz o Infiniti, considera que, actualmente, existen formas más eficientes de conseguir espacio interior. Así, gracias a la eliminación de los túneles de transmisión y a la menor necesidad de piezas de los trenes de potencia de los coches eléctricos, no haría falta recurrir a carrocerías tan voluminosas para que sus ocupantes puedan disfrutar de un amplio habitáculo.

Además, señala que otro de los desafíos a los que se enfrentarán este tipo de modelos consiste en la necesidad de que sigan exponiendo cierto avance tecnológico, que este sea visible. Esto exigiría una adaptación del formato SUV, de cuyo éxito dependerá la supervivencia de este tipo de carrocerías en el mercado.

Todo hace indicar que la electromovilidad provocará un regreso a la concepción de los automóviles previa a la fiebre SUV. La necesidad de ofrecer una buena eficiencia aerodinámica, con el objetivo de mejorar la autonomía de los automóviles a baterías, así como también incrementar la imagen de sostenibilidad de la industria, implicará que las berlinas y los modelos familiares recuperen su cetro como vehículos preferidos de los consumidores. Más si cabe en el caso de que los fabricantes centren sus esfuerzos en este tipo de carrocerías, dejando de lado los SUV. La propia marca surcoreana, aunque ha presentado recientemente su KIA EV9 con un aspecto innegablemente de todocamino, demuestra con su Kia EV6 que el futuro no es necesariamente SUV, y nosotros no podemos sino celebrarlo.