El V8 del Corvette Z06 se inspiró en… ¿el V8 del 458 Italia?

El V8 del Corvette Z06 se inspiró en… ¿el V8 del 458 Italia?

General Motors compró un F136 en eBay y lo estudió para desarrollar el motor del Z06


Tiempo de lectura: 5 min.

Chevrolet, por fin, hizo realidad los rumores que venían surgiendo desde hace años y después de muchos prototipos con motor central, puso en circulación un Corvette con el motor tras los asientos, suponiendo un cambio drástico en la historia del deportivo yankee, que lleva toda su historia, desde la década de los 60, siendo un automóvil con motor delantero. General Motors quería darla una vuelta de tuerca al modelo para su octava generación, crear un deportivo que fuera capaz de plantar cara a los modelos más prestacionales europeos el paso al motor central era casi obligado, no en balde, todos los grandes deportivos contra los que tendría que medirse, tales como el Lamborghini Huracán o el Ferrari F8 Tributo, tienen motores traseros centrales.

Sí, los objetivos de General Motors son ambiciosos, pues hemos mencionado dos de los coches más respetados del segmento de los superderpotivos, con un diseño y una técnica muy depurada. No se podía seguir con el motor delantero, pero además, tampoco podía aspirar a plantarles cara con una versión estándar del Covertte. El modelo norteamericano, al contrario que los europeos, tiene toda una gama de versiones, que abarcan un gran número de usuarios. La versión más modesta, equipada con un motor V8 de gran cilindrada, como es habitual en el modelo, promete 495 CV, una cifra de potencia lejana respecto a sus principales rivales, aunque el precio, por otro lado, también es igual de lejano, pues en Estados Unidos se vende desde 64.500 euros. Es una característica típica del Corvette, pues es uno de los deportivos de su categoría más baratos.

Por eso, entre otras cosas, Chevrolet aprovecharía una de sus muchas versiones, para crear un coche lo suficientemente capaz, como para aguantar el ritmo de los italianos. Esa versión, como cabe esperar, es el Corvette Z06, que estrena un motor V8 de cigüeñal plano con casi 700 CV, el primer propulsor de cigüeñal plano que ha desarrollado General Motors que, además, tampoco suena como el típico V8 estadounidense, un detalle que para muchos significa perder algo de esencia. Este motor es el centro del coche, el corazón, como es lógico, una revolución que para General Motors, que no tenía experiencia ninguna con esta configuración, supuso muchos años de trabajo.

Z06 fue creado inicialmente para competir en carreras en 1963, y continúa favoreciendo el desarrollo de los modelos de carrera para mejorarlos tanto en la calle como en la pista. Eso también significa que hemos probado el Z06 en las mejores pistas del mundo, desde el Circuito de las Américas en Estados Unidos, hasta Nürburgring en Alemania.” Tadge Juechter, Director Ejecutivo de Ingeniería de Corvette

El propulsor del Corvette Z06, denominado LT6, está basado en el motor empleado en el Corvette C8.R, la versión de competición que participa en campeonatos como el WEC en la categoría GT. No obstante, ese motor, a su vez, tiene una interesante historia detrás que está al borde del espionaje industrial, siendo especialmente interesante y llamativa. Según parece, Jordan Lee, jefe de ingenieros de Chevrolet, admitió en 2022, que la inspiración para el V8 de cigüeñal plano del Z06 llegó de Europa, donde estuvieron investigando los responsables del proyecto, con especial atención en Ferrari, pues los italianos tienen experiencia con motor de ocho cilindros y cigüeñal plano.

Corvette Z06 LT6

Lo más llamativo es que compraron un propulsor de un Ferrari 458 Italian que había tenido un accidente, a través de eBay. El motor estaba en Polonia y ni siquiera se molestaron en viajar hasta allí para comprobar el estado del motor o sí, al menos, existía. Lo recibieron en las instalaciones de General Motors tiempo después, tras haber abonado un total de 20.000 dólares, unos 19.980 euros. Es decir, compraron un V8 F136 del año 2009, el cual, una vez en Michigan, fue desmontado por completo y estudiado en busca de sus secretos, de posibles mejoras y en busca de inspiración. Básicamente, hicieron ingeniería inversa para obtener los conocimientos necesarios para desarrollar su propio V8 de cigüeñal plano.

Se aplicaron muchas cosas más cosas, no solo se “copio” el motor del 458 Italia. Por ejemplo, la lubricación es por cárter seco con seis bombas de aceite, los inyectores están junto a las válvulas de escape y enfrentados a los puertos de carga y se prescinden de taqués hidráulicos empleando en su lugar, un sistema muy común en motor y denominado “finger followers”, más adecuados a elevados regímenes de giro. También se han implementado unas válvulas adicionales en el colector de admisión, que generan unos pulsos de presión en el aire, debido a un fenómeno llamado “Inestabilidad Kelvin-Helmholtz”, permitiendo aumentar el volumen efectivo del colector de admisión.

El resultado ya lo conocemos todos: un motor V8 atmosférico de 5.5 litros, que rinde 670 CV y 623 Nm de par, con un sonido espectacular, pero poco americano. Uno de los motores más especiales de General Motors, que según se dice, contará con variantes más potentes, como la que dará vida al Corvette ZR1, que contará con sobrealimentación por turbo y al menos 800 CV.

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Sobre mí

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

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