En espíritu RACER nos gustan los automóviles especiales, únicos, peculiares, y en este caso se trata del Spyker C8 Spyder, una obra de arte sobre ruedas. Esta belleza llega aquí porque RM Sotheby’s subasta una unidad con 800 millas (1.287 kilómetros) en el odómetro, un coche apenas estrenado.
No hace ni un año que recibíamos malas noticias de la marca holandesa, aunque de nuevo parece estar tratando de resurgir gracias a nuevos inversores; pero ese no es el tema de hoy. En las imágenes tenemos un precioso Spyker C8 Spyder de los 121 producidos, pintado en este llamativo color amarillo en contraste con la tapicería en cuero negro. De los C8 Spyder solo 15 equiparon el retrovisor central, por lo que estamos ante una unidad especial.
Tras los asientos traseros se encuentra el V8 atmosférico firmado por Audi, cuyo cubicaje de 4,2 litros genera 400 CV que viajan a través de una caja de cambos Getrag de seis velocidades hasta las ruedas traseras. El propulsor consigue impulsar sus 1.325 kg hasta los 100 km/h en 4,5 segundos y es capaz de alcanzar los 300 km/h. A pesar de que pueda tener cifras tan decentes, no creo que sea un modelo para llevarlo al límite, es más una pieza de museo con la que salir a pasear muy de vez en cuando.
La imagen del Spyker C8 Spyder en la carretera impresiona, tanto por su sonido bronco como por unas proporciones perfectas
En el exterior lo complementan las llantas “aeroblade” de 19 pulgadas, que hace honor al origen aeronáutico de la marca. Las entradas de aire para el propulsor, el diseño sin marco del parabrisas, o los retrovisores satinados rematan un exterior impresionante, sin líneas excesivas o extravagantes. Si pasamos al interior, el diseño en cada rincón destila artesanía, la precisión con la que se ha diseñado y montado con precisión cada pieza es increíble.
Aquí la inspiración aeronáutica es más evidente, el tablero plano de aluminio plagado de indicadores con bisel de cromado parecen arrancados de un avión. Los indicadores están retroiluminados en verde y flanqueados de interruptores metálicos que apoyan aún más la sensación de estar pilotando en el aire en lugar de en la carretera. El volante actual no vino de fábrica, pero fue adquirido al especialista de Spyker Jasper den Dopper, y se ve siente como si hubiese sido creado por y para este modelo.
El marco que atraviesa las ventanillas no es casual, al tener tanta superficie acristalada no puede alojar todo el cristal en su puerta y se recurre a esta solución ya utilizada en modelos como el McLaren F1. La obra maestra del diseño para mí es la timonería del cambio a la vista, me quedaría hipnotizado viéndola funcionar.
El interior parece estar mimado al milímetro, y el patrón acolchado en rombos encaja perfectamente en el C8 Spyder
Esta unidad parece venir con todas las revisiones hechas, incluida la del aire acondicionado que ha alcanzado los 2.000 $, ya puede conseguir que el interior sea el polo norte. Esperemos que el 23 de enero encuentre un propietario que permita que el Spyker C8 Spyder, una obra de arte sobre ruedas, sea admirada por más aficionados en la carretera. Os dejo por aquí el enlace a la subasta, está en Arizona, pero seguro que el coche merece la pena.
Francisco Javier Rodriguez
En la época en la que pasaba el día dibujando coches, alguien me preguntó: ¿pero a ti te gusta más la mecánica o la carrocería de los coches? Esa misma semana leí el Manual del Automóvil de Arias Paz. Tenía 14 años, esa simple pregunta es la razón por la que estoy aquí, desde entonces no he parado de aprender sobre lo que se convirtió en mi pasión.COMENTARIOS