Los coches de Mazda siempre han tenido un ligero regusto deportivo, tanto por diseño como por tacto general y por comportamiento. Sin embargo, hace tiempo que los deportivos de Mazda dejaron la línea de montaje sin que se haya intentado, ni de refilón, volver a ponerlos en producción. Por muchos rumores que se hayan podido publica, por muchos prototipos que fabrique la marca y por mucho que los fanáticos lo quieran, Mazda no tenía intención de recuperar su lado más dinámico. Hasta ahora.
En el salón de Tokyo ha presentado dos prototipos, un Mazda 3 y un MX-5, ambos con un aspecto decididamente racíng –sobre todo el Miata– y que adelantan, según parece, el regreso de Mazda al terreno deportivo. Pero no será con su antiguo sello Mazdaspeed, será a través de Mazda Spirit Racing, lo que supone que su anterior sello desaparecerá para siempre. Tampoco es nada nuevo, para ser sinceros, pues Mazdaspeed lleva muchos años fuera de juego y ahora, para volver otra vez al ruedo, nada mejor que empezar de cero, o casi.
Mazda Spirit Racing ha estado presente en la Serie Super Taikyu japonesa desde 2021, como antesala de su llegada a producción. Obviamente, todo lo que se ha puesto en práctica se usará en los coches de producción y que la marca representa con los dos concept car presentados en Tokyo. Dos coches de los que no tenemos muchos datos más allá de lo que se ve a simple vista.
Por un lado está el Mazda Spirit Racing RS, nombre que recibe el Mazda MX-5 mostrado en el evento. Se puede ver que tiene el casco más cerca del suelo, nuevas llantas –que le sientan muy bien, por cierto–, detalles en rojo y unos elementos aerodinámicos en la zona baja de la carrocería. Detalles específicos que también se pueden encontrar en el habitáculo, mientras que bajo el capó se esconde un propulsor de dos litros y nuevas suspensiones –algo ya figurado, por la baja altura de la carrocería con respecto al suelo–. Con respecto al Mazda Spirit Racing 3 –el Mazda 3–, lo único que se ha dicho es que las especificaciones está “actualmente bajo consideración”.
No hay confirmación sobre la llegada de estos coches a producción, por ahora todo lo que podamos decir es mera especulación, quizá sean dos creaciones cuyo objetivo es, simplemente, llamar la atención. Además, Mazda, ha centrado su atención en el segmento premium y el siguiente paso es la futura electrificación de la gama, más allá de la semi hibridación actual, y más allá del Mazda MX-30, que se ofrece, recordemos, con motor eléctrico y con hibridación en serie –no, no es un eléctrico con autonomía extendida, el MX-30 R-EV es u híbrido–.
Sin embargo, y dado que la especulación está a la orden del día, si los prototipos presentados por Mazda llegaran a producción, estaríamos ante una situación similar a la de Toyota con su sello GR Sport o con los ST Line de Ford.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS