Cuando se trata de aglutinar en un automóvil cosas como la clase, la elegancia o la agresividad de un deportivo, pocas marcas tienen la maestría de Aston Martin. Pocos fanáticos del automóvil pondrá en duda esta afirmación y parte de culpa hay que echársela a Ian Callum, uno de los mejores diseñadores de los últimos tiempos y responsable, entre otras cosas, de algunos de los Jaguar más bonitos de la época actual de la marca, aunque uno de sus mejores trabajos fue, sin duda, el Aston Martin Vanquish de 2007.

Ian Callum trabajó para Ford, para TWR (con Petes Stevens y Tom Walkinshaw) y posteriormente regresó a Ford en 1999, cuando esta controlaba Jaguar y Aston Martin, pasando los últimos años en Jaguar. Tras salir del grupo Jaguar Land Rover puso en marcha un proyecto que tenía en mente desde hacía tiempo, cuyo resultado acaba de presentar. Llega tan solo un mes después de crear su propia compañía de diseño tras salir del fabricante británico y aunque no es un proyecto creado desde cero, no es tarea sencilla.

El proyecto se llama Aston Martin Vanquish 25 by Callum, que básicamente se trata de un restomod del genial Aston Martin Vasquish de 2007, considerada de una de sus mejores creaciones y un icono de la marca. Un proyecto único para devolver la grandeza a un coche que todavía sigue siendo espectacular, más si cabe gracias a su motor V12 atmosférico. Sólo se harán 25 unidades para todo el mundo mediante técnicas totalmente artesanales.

No es un trabajo superficial o meramente estético, se trata de algo mucho más profundo. Cada unidad será desmontada por completo y se volverán a reconstruir añadiendo en el proceso las mejoras desarrolladas, así como elementos fabricados con materiales y tecnología actual. Ya hay dos unidades fabricadas, una para el desarrollo de la suspensión y otra para mostrar los cambios tanto interiores como exteriores, gracias a empresas colaboradoras como R-Reinforged.

Todo el trabajo se llevará a cabo en las instalaciones que Callum tiene en la localidad de Warwick, en Reino Unido. Se cambiará suspensión, frenos cerámicos de mayores dimensiones, nuevas llantas de 20 pulgadas, retoques aerodinámicos en forma de difusor trasero o una nueva calandra con formas similares a las del último Vanquish o un spoiler que toma forma mediante un alargamiento de la tapa del maletero. Dentro, en el habitáculo, también habrá novedades, principalmente centradas en mejorar la tecnología de a bordo, pequeños detalles de equipamiento y nuevos elementos como la consola central.

El motor, el mismo V12 atmosférico original, se verá retocado y aumentará la potencia hasta los 447 KW, unos 607 CV. Como novedad importante, Callum ofrecerá un cambio automático por convertidor de par y seis relaciones. Un detalle importante, pues la caja de cambios fue el mayor defecto del Vanquish original llegando incluso a obligar a la marca a ofrecer una conversión a cambio manual.

Respecto a las unidades necesarias para la transformación, serán suministradas por la propia Aston Martin y por los actuales propietarios que quieran realizar la conversión. En cuanto al precio, con el coche incluido, es de 550.000 libras, unos 602.923 euros.

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