El ímpetu del ser humano por ser cada vez más rápido jamás tendrá fin, es un facto inherente en nuestra naturaleza. Pero no solo más rápidos en términos absolutos, sino sobre cualquier tipo de vehículo, como por ejemplo un cortacésped Husqvarna. ¿Una genialidad o una locura? Tal vez ambas cosas, pero el proyecto “Wild Clara” no deja indiferente a nadie.

Si el Honda Mean Mower con motor de CBR 1000 RR y casi 200 CV te parecía sencillamente extremo, olvídate de él, que aquí viene “la” súper segadora. Se ha diseñado en Rusia a partir de un cortacésped Husqvarna TC 130, donde su pequeño bloque motor de fábrica se ha sustituido por un V8 de gran cilindrada. Bautizado como Wild Clara, detrás de esta creación única hay una bala con un motor de 6.162 cm³, 426 CV de potencia y 610 Nm.

Desde ahora, el Husqvarna Wild Clara es el cortacésped más rápido del mundo sobre suelo ruso. Ha sido desarrollado en conjunto por el Instituto Científico de Investigación del automóvil y motores de automóvil (NAMI) y los especialistas de la compañía Masters Custom Work. Si de algo saben en las gélidas tierras es matar el tiempo con creaciones que pueden llegar a quitarte el hipo más rápido que un susto.

Lógicamente, el “Wild Clara” ha contado con la supervisión del libro Guinness ruso. En resumidas cuentas, ha sido capaz de alcanzar una velocidad máxima de 202,88 km/h, aunque no es una cifra suficiente para batir al cortacésped de Honda Mean Mower (242,99 km/h). El motor de ocho cilindros de Wild Clara es un L86 de General Motors, un propulsor que se monta en el Cadillac Escalade y sus primos de plataforma, el GMC Yukón y Chevrolet Silverado.

Sin embargo, el Husqvarna “Wild Clara” no está del todo en forma. Han surgido problemas en la caja de cambios y otros detalles que le han impedido alcanzar aún más velocidad. Pero es probable que la competencia con Rusia se desencadene ahora. Al igual que el cortacésped de Honda, el “Wild Clara” cuenta con un chasis tubular reforzado y un volante deportivo Sparco que poco tiene que ver con un cortacésped estándar.

Para poder hacer oficial este récord, el “Wild Clara”, además de correr a gran velocidad, debía demostrar que mantenía sus funciones de cortacésped. De ahí que la piloto Yana Kholodkovskaya tuviera que ponerse manos a la obra, cortando la hierba que había junto a la zona en la que estableció la marca. ¿Quién iba a decir que iba a existir competencia en una categoría tan absurda como encantadora?

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