El Dodge Rampage, conocido también como Plymouth Scamp (remarcado), se fabricó entre 1982 y 1984 en Estados Unidos y se basaba en la plataforma L del grupo Chrysler, construida de forma específica para amortiguar la bajada de ventas causada por la crisis del petróleo de 1973, que se alargó hasta bien entrada la década de los 80. Se podría encuadrar dentro del segmento de los compactos (tallaje americano), pero al mismo tiempo era una camioneta con el cajón de carga abierto,y pasando de la propulsión trasera a la tracción delantera como gran novedad.
Para su construcción tomó elementos de diferentes vehículos del grupo Chrysler. De la variante deportiva del Dodge Charger/024 tomó el bastidor y el frontal, y del Dodge Omni/Plymouth Horizon (Talbot Horizon aquí) utilizó la suspensión independiente de muelles helicoidales, amortiguadores telescópicos y barra estabilizadora del eje delantero y ballestas con amortiguadores telescópicos del eje trasero.
A consecuencia de los últimos coletazos de la crisis del petróleo de 1973 se optó de manera drástica pasar a vehículos más pequeños con motores pequeños y al uso de la tracción delantera
La tracción delantera mostraba innegables ventajas sobre la trasera, como una mayor facilidad de manejo y una mayor adherencia, al menos en el segmento que los norteamericanos llamaban de “media tonelada”, es decir, con una capacidad de carga de 500 kg. Las camionetas y/o pick-up de propulsión trasera eran más propensas a sobrevirar y a perder tracción en condiciones que no fuesen las más adecuadas.
El motor estaba situado en posición delantera transversal y transmitía su potencia al eje delantero, algo poco común en este tipo de vehículos. Era un bloque de cuatro cilindros en línea de 2,2 litros en línea de la familia K, de aspiración natural (atmosférico), que rendía entre 95 y 100 CV. Puede parecer un rendimiento pobre, pero lo podemos comparar con el V8 de 5,7 litros de otros modelos del grupo, como el Chevrolet El Camino coetáneo, que solo entregaba 105 CV.
Las cajas de cambio iniciales fueron una manual de cuatro velocidades y una automática (A 404) de tres. En 1983 se mejoró con una manual de cinco. Su consumo oscilaba entre los 11 l/100 km en ciudad y los 8 l/100 km por carretera (son valores aproximados).
Su peso era de solo 1.100 kg y su capacidad de carga ascendía a los 519 kg, que lo encuadraba en la categoría de “media tonelada”. Entre sus rivales se encontraban los Chevrolet El Camino, Volkswagen Rabbit Sportruck y Subaru Brat
En 1983 salió al mercado el Plymouth Scamp. También existió un prototipo, Shelby Street Fighter Rampage Concept, construido por los ingenieros de Chrysler y Shelby a petición de Carroll Shelby, con motor turbo y cinco marchas, pero acabó su destino en un desguace hace varios años. Además, hubo una versión especial denominada California Shelby Rampage, construida en 1984 y que solo se vendió en algunos concesionarios del Estado de California, con el subchasis delantero del Shelby Charger, unas llantas de aleación de 15 pulgadas y un paquete de modificaciones aerodinámicas.
No se vendieron tantas unidades como hubiese deseado Chrysler. Del Dodge Rampage se vendieron 17.636 unidades en 1982, 8.033 en 1983 y 11.732 en 1984. Del Plymouth Scamp salieron a la venta 2.184 unidades del modelo base y 1.380 del Scamp GT. Pero la razón no era que fuese un mal producto, al revés, ya que era admirado por sus poseedores, sino porque el mercado de este tipo de vehículos estaba languideciendo poco a poco.
En 2006 se resucitó el concepto Rampage en el Chicago Auto Show. Era un vehículo de tracción delantera propulsado por un motor HEMI V8 de 5,7 litros, 340 CV de potencia y 288 Nm de par. Se le pusieron los asientos que utilizaban las furgonetas (minivan) Chrysler, y a su interior se accedía a través de cuatro puertas, las dos delanteras convencionales y las traseras correderas, con la ventaja de no contar pilar B.
Una de sus ventajas era el aprovechamiento del espacio, generoso para la carga y para los ocupantes, contando con un asiento del acompañante con el respaldo abatible, al igual que el asiento trasero. Era tan grande como la pick-up Dodge Ram, pero parecía más un vehículo importado de Japón que un producto genuinamente americano.
En Europa, como resulta bastante evidente, si acaso llegaron unidades sueltas de algún militar de base estadounidense o por algún importador europeo que quisiese algo realmente original. Por cierto, “Rampage” se puede traducir como “masacre”, y “Scamp” como “pícaro” o “tunante”.
Ginés de los Reyes
Desde que tengo conciencia me llamó la atención cualquier cosa con ruedas. Aprendí a montar en bicicleta al mismo tiempo que a andar, y creo que la genética tiene algo que ver: mi padre adoraba los coches, les ponía nombres, mi abuelo conducía y participaba en el diseño de camiones, y le privaban los coches...¡Qué chulo! Este tipo de coches me mola bastante, lástima que nunca se vendieran en España y que ya ninguna marca se atreva a lanzar nada parecido. Habrá que recurrir a la sierra mecánica