Hoy, si eres un fabricante asiático, te irá bien en el mercado europeo… a menos que seas Honda. No es ninguna novedad que la firma japonesa no marca el pulso del día a día en las calles del continente. Detrás de su intrascendencia existe una serie de razones que, juntas, dan como resultado una compañía casi en estado vegetativo.
Precios elevados y clientes que prefieren otras opciones a valores equivalentes; incompatibilidad de segmentos y dimensiones en relación con sus modelos exitosos de Estados Unidos, por lo que coches como un Accord o un Civic sedán no tienen demasiado lugar, y otros como el CR-V se ven en desventaja contra la hegemonía de los SUV compactos; ofertas limitadas de modelos; el fracaso del Honda e como ejemplo de su floja lectura inicial en materia de vehículos cero emisiones –un mini con un valor de mercado demasiado elevado para la poca autonomía eléctrica que entregaba–; ciertos diseños que no convencen; una presencia en la competencia de mercado que no está a la altura.
Ante estos factores, tampoco parece haber de parte de Honda una voluntad a cambiar la situación y dar un giro radical que le dé números de ventas decentes que hagan valer su participación en el continente. No hablo puntualmente de su agotadora postura de no ceder y bajar los precios, sino de su apagado posicionamiento, frente al cual no parece tomar cartas drásticas en el asunto. Su red de concesionarias no se ha destacado por ser muy amplia que digamos en los últimos años y esto ha atentado contra la atención y la atracción de clientes. A esto se suma un departamento de marketing inocuo y, repito, la oferta, con una declaración oficial no muy lejana en el tiempo que grafica su desempeño comercial.
“Hemos tenido una gama limitada, con solo cuatro modelos en la alineación. Ahora tenemos hasta siete u ocho si tenemos en cuenta al Type R (en referencia al Civic). Tenemos una gama relativamente completa, pero sigue siendo simple”, fueron las palabras de la británica Rebecca Adamson, a cargo de la división de Automóviles de Honda Motor Europe, cuando se anunció en el otoño del 2023 la discontinuidad del Honda e. Una inversión que no alcanza para despegar, si es ese el objetivo de la marca, porque, por el contrario, el mensaje que viene transmitiendo podría traducirse en algo así como “nos alcanza y sobra con nuestros números en Japón y Norteamérica”.
Honda en España: La actualidad y la rebaja de precios en su gama
Cada año es el reflejo del anterior y los números a nivel nacional dan cuenta de ello. De las 2.601 unidades entregadas en el 2023 a las 3.843 ventas del 2024, lo que le ha significado un crecimiento interanual abultado en porcentaje, que debemos atribuir a ese leve aumento en la gama gracias a la introducción de coches más a tono con las necesidades del mercado europeo como es el e:Ny1, pero, así y todo, un crecimiento insuficiente para intentar moverse del 33° puesto en el ranking de las marcas más elegidas en España, donde hasta se priorizan los SUV alemanes premium mucho antes que sus modelos a la hora de las conveniencias de precios, equipamientos y prestaciones.
En materia de propulsión, el dominio de los híbridos y los eléctricos en stand by contribuyen a que la Honda europea esté un poco más cubierta y actualizada. El lanzamiento del Honda Civic e:HEV 2025 en carrocería hatchback puede resultarle beneficioso. Sin embargo, si bien ha mejorado un poco la oferta, poco cambiará si, para empezar, no se ejecuta un acomodamiento de sus precios. La cuestión de los valores desproporcionados es un reclamo repetitivo entre los usuarios españoles y tal parece que la marca ha empezado a atenderlo.
Toda su flota ha sido sometida a descuentos. Desde el Honda Jazz –antes entre 28 y 30 mil euros, ahora entre 26 y 27 mil–, pasando por el mencionado Civic híbrido –antes desde 36.100 euros, ahora desde 33.500– y atravesando toda la gama SUV –los acabados del Honda HR-V ahora tres mil euros más baratos, el eléctrico e:Ny1 se ofrece cuatro mil euros más accesible– hasta llegar al híbrido enchufable del Honda CR-V –que se ha rebajado siete mil euros–, la firma anuncia actualmente una necesaria actualización de precios en todas las versiones. Un paso que debía dar.
Mauro Blanco
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