A principios de julio vimos por primera vez el prototipo GT-R50, una creación de Italdesign y Nissan para conmemorar el medio siglo de la casa italiana y del propio GT-R. La versión de producción, confirmada oficialmente apenas difiere de aquel prototipo y será totalmente personalizable para sus futuros dueños. El coste de tanta exclusividad no es baladí, 990.000 euros sin impuestos ni extras; en España serían más de 1,34 millones de euros.

Los interesados y afortunados que puedan permitírselo pueden visitar el sitio www.GT-R50.nissan para encargar cómo quieren su GT-R50, ya que van a la carta. Se puede elegir la combinación de colores externa, los del interior y paquetes de equipamiento. Las entregas comenzarán el año que viene y durarán hasta mediados de 2020.

Al igual que el prototipo, el motor está apretado hasta los 720 CV, con piezas heredadas de la versión de carreras GT3. Claramente estamos ante un coche de coleccionista cuyo precio puede aumentar desde el mismo momento de su concepción. El GT-R50 prototipo fue visto en Goodwood (Reino Unido), Spa-Francorchamps (Bélgica), Monterey (EEUU) y el cruce Nissan en Ginza (Japón). Ahora puede verse in situ en la Nissan Gallery de Yokohama (Japón).

De estos veremos muy pocos por la calle, básicamente porque ver uno solo ya tendrá consideración de encuentro en la tercera fase.