Vaya por delante una cuestión que, posiblemente, no sea únicamente cosa nuestra. No entendemos, ni entenderemos nunca, la forma de pensar y de actuar de muchos coleccionistas de coches. Tienen las capacidades económicas para tener lo que quieran, y por supuesto, lo tienen, pero se lo compran para no usarlo, para dejarlo en un garaje al que, seguramente, vayan dos veces al año. Pero no contentos con eso, no sería la primera vez que encontramos un supercoche a la venta, el cual, no ha sido usado o que ha sido conducido durante menos de 100 kilómetros. Es casi una ofensa para los ingenieros y para los que han trabajado en el desarrollo de esos coches.
Ahora mismo, seguro que hay alguien que piensa “señores de espíritu RACER, esos coches se tratan como bienes de inversión, y no se usan para evitar su deterioro”. Y tendrá más razón que un Santo, pero todavía es una cuestión que no entenderemos nunca. ¿De verdad comprarías un Aston Marton Valkyrie AMR Pro, para dar “cuatro vueltas” a un circuito y luego ponerlo a la venta? Quien hace eso no le gustan los coches y efectivamente, solo los ve como bienes de inversión, como quien se compra un cuadro de Picasso y lo guarda en una caja fuerte. ¿Qué sentido tiene?
El Aston Martin Valkyrie AMR Pro es la versión más radical del modelo británico, no en balde, estaba destinado a ser el representante de la marca en la categoría LMH
Pues así ha ocurrido en esta ocasión, un coleccionista de Dubai compró un Aston Martin Valkyrie AMR Pro, lo uso dos veces –para el shakedown de fábrica y en un evento en pista– y lo ha puesto a la venta a través de RM Sotheby’s. ¿No le gustó el coche? ¿No era lo que esperaba? Ni siquiera salió de su “zona de confort”; porque según informa la casa de subastas, las dos veces que rodó en pista fueron en el circuito de Bahrein.
El Aston Martin Valkyrie AMR Pro es un el proyecto para LMH que la compañía británica canceló en 2020, y luego convirtió en una versión especial del modelo, el cual, no está homologado para circular por vías públicas. Por ello, su aerodinámica es todavía más radical, absolutamente de carreras, al igual que otras soluciones, como un chasis con una distancia entre ejes ampliada casi 380 milímetros, 96 milímetros más ancho delante y 115 milímetros más ancho detrás. Es el más radical de todos los Valkyrie y también el más exclusivo y por supuesto, el más rápido en circuito.
No obstante, es más rápido por aerodinámica y por chasis, pues el motor es el mismo V12 Cosworth atmosférico capaz de alcanzar las 11.000 revoluciones y además, prescinde del sistema de semi hibridación del modelo “de calle”, lo que hace que sea 150 kilos más ligero.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS