Los coches deportivos, sobre todo los muy deportivos, equipados con motores de gran cilindrada, tienen los días contados. Su futuro es negro como la noche, aunque algunas marcas ya estén buscando formas de paliar esta situación, como es el caso de Lamborghini y la hibridación, por poner un ejemplo. Sin embargo, su compañera Audi no apostará por esa solución para sus grandes motores y reconducirá sus modelos más prestacionales hacia la electricidad.

Ya hemos visto como Audi está preparando una gran evolución en este sentido, con una gama de modelos eléctricos que se verá aumentada poco a poco y donde los deportivos, precisamente, también tendrá su lugar. Ya se sabe, por ejemplo, que el futuro del Audi R8 está en los motores eléctricos, siendo la actual generación la última en usar un propulsor de combustión.

No son rumores, el Audi R8 será eléctrico y lo confirmó la directora de marketing de Audi Sport, Linda Kurz, durante una entrevista para Road Show. Sin embargo, el jefe de la división Audi RS, Sebastian Grams, le dijo a Top Gear que había muchos planes para el R8, planes que incluían nuevas versiones y además, enfocadas en la diversión al volante.

Lo que puedo decir es que tenemos planes para hacer más; definitivamente habrá más en esta generación de R8. Y como puedes ver en el R8 con tracción trasera, estamos manteniendo la ‘diversión de conducción’ al máximo. Lo que estamos haciendo es intentar aprovechar al máximo el ciclo de vida. En este momento la gente está disfrutando del R8 y tenemos muchas ventas. Pero puedo decir que tenemos suficientes ideas para el futuro”. – Sebastian Grams en declaraciones a Top Gear.

Foto procedente de Motor16, pues ver más imágenes de esta mula de pruebas en su portal web

El Audi R8 se encuentra al final de su vida comercial, le quedan un puñado de años en el mercado hasta su adiós definitivo y la marca podría estar trabajando en su despedida en estos mismos momentos. Una versión muy radical, al estilo del Lamborghini Huracan STO. Así al menos lo dejan entrever las unidades de pruebas que han sido vistas y que no tenían ningún tipo de camuflaje.

Dichas unidades lucen una serie de elementos que no tienen el resto de versiones actuales, como son los aletines aerodinámicos en el paragolpes delantero o el alerón trasero. Ese alerón trasero sirve de complemento a un difusor que tiene dos enormes salidas de escape a cada lado. También hay taloneras y un labio delantero, todo ello fabricado, según parece, con fibra de carbono.

Se está especulando con una versión más radical del R8 RWD, es decir, del Audi R8 de propulsión, pero nada es seguro. La unidad de desarrollo, vista en plenas carreteras nevadas, no permite adivinar nada más, porque no hay vídeo que nos permita ver el coche en movimiento y comprobar cómo se comporta en esas condiciones. Sin embargo, es posible que en efecto, sea un R8 de propulsión porque hay un sencillo detalle que delata esa condición: la acumulación de nieve en los guardabarros traseros, pero no en los delanteros.

Los rumores apuntan a una versión muy racing, solo para circuito o como poco, una versión muy radical para vías públicas.