KTM es mejor conocida por sus motocicletas, pero la compañía también fabrica el X-Bow desde 2008, una máquina de cuatro ruedas que bien puedes usar en la calle, pero que sin duda alguna está diseñada para atacar los circuitos. Tras conocer los primeros detalles en febrero, ahora es el momento de conocer por completo al KTM X-Bow GTX, el juguete para las pistas que siempre has querido tener (o al menos desde ahora).
A diferencia del X-Bow original, el nuevo modelo de la firma austriaca está compuesto por una carrocería de fibra de carbono completamente cerrada. El chasis monocasco, también de fibra de carbono, viene asociado a una jaula antivuelco homologada para la categoría GT en base al Apéndice J de la normativa de la FIA. Para estar bien sujetos, el X-Bow GTX hace gala de asientos de competición firmados por Recaro –de fibra de carbono– y un arnés de seis puntos de Schroth como parte del equipamiento de serie.
Además, con el objetivo de hacerlo aún más ligero, se ha equipado una dirección de asistencia eléctrica en vez de hidráulica, aunque la compañía promete un gran feedback; pensemos que Mazda lo consiguió con su MX-5 (ND). Gracias a conjunto de materiales ligeros que constituyen la estructura del coche, el KTM X-Bow GTX marca sobre la báscula unos escuetos 1.048 kilos. No es mucho, pero es justo decir que el carrozado integral sí que añade más peso respecto al X-Bow que conocemos en orden de 150-180 kg.
KTM describe el X-Bow GTX como su “vehículo más espectacular, hermoso y tecnológicamente avanzado”, y su motor de cinco cilindros, cortesía de Audi Sport, pone la guinda al pastel
Pero tampoco es que por ello las prestaciones vayan a ser menos. Ambos modelos acogen un motor turboalimentado de cinco cilindros y 2,5 litros suministrado por Audi Sport, ajustado para entregar 530 CV en lugar de los 241/299 CV que erogaba su predecesor. KTM solo ha modificado las válvulas de inyección, la de descarga, el sistema de admisión, el de escape y el software interno, que ayuda a conseguir un par de 650 Nm. Como resultado, la relación potencia/peso es de 1,98 kg/CV, favoreciendo al rendimiento y la eficiencia.
“En el automovilismo, es necesario centrar el desarrollo en una relación potencia/peso superior para ser aún más rápidos con motores más eficientes y de pequeño volumen”, dijo Hubert Trunkenpolz, miembro de la junta de KTM. La transmisión corre a cargo de una caja de cambios secuencial Holinger MF de seis relaciones con un embrague de competición de metal sinterizado operado eléctricamente, como los LMP del campeonato de resistencia (WEC). Junto a ella, un diferencial de deslizamiento limitado se encarga de enviar toda la energía a las ruedas traseras.
Para garantizar la competitividad en los track days, KTM ha equipado al nuevo X-Bow GTX con un depósito de combustible de seguridad FT3 de 120 litros, lo que significará menos visitas a la gasolinera para los usuarios ocasionales. La firma austriaca también afirma que el motor Audi, montado en el medio de un bastidor de tubos de acero de alta resistencia, fue la solución más eficiente en cuanto a rendimiento y facilidad de uso. Para ultimar, hay una suspensión regulable Sachs y un sistema de frenos con discos de 378 mm delante y 355 mm.
Cuando se trata de apariencia, el X-Bow GTX es tan salvaje como los X-Bows anteriores, si no más. Esto, combinado con el precio inicial de 230.000 euros en Europa antes de impuestos, hace que esta sea una máquina realmente impresionante al nivel de unos pocos constructores. Como ejemplos tenemos al Ariel Atom, al Radical SR 3 o al Donkenvoort D8-JD70.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS