A comienzos de la década pasada, el Grupo Volkswagen se metía de lleno en el segmento A con un trío de modelos gemelos: el Volkswagen Up!, el SEAT Mii y el Škoda CitiGo. Ideados para la jungla urbana, nunca se plantearon como coches emocionantes. Sin embargo, para eso están los locos de los coches, eso que convierten aburridos medios de transporte en un juguete de niños grandes. En este caso, un Škoda CitiGo con tracción total y más de 360 CV.
Estamos hablando de un auténtico lobo con piel de cordero, donde tan solo se conserva la carrocería del pequeño urbanita checo. El motor, la transmisión, la suspensión, los frenos y el interior poco tienen que ver con los componentes originales. Y, aunque desde el exterior parece un CitiGo algo vitaminado, si nos fijamos con detalle, podemos vislumbrar muchos detalles enfocados a mejorar el rendimiento en las pistas. Desde luego, no es el típico coche que encontrarías en el parking de una quedada del centro comercial.
Para empezar, podemos ver unas llantas de 17 pulgadas tomadas del Škoda Octavia RS (1Z) que se ven enormes para el tamaño del vehículo, mientras que el intercooler que sobresale de la parte inferior de la entrada del parachoques, la toma de aire del capó, las ventanillas de policarbonato y el alerón de tipo “cola de pato” nos dan una idea de lo que esperar. Y lo mismo se aplica a bordo, que está completamente despojado de elementos superfluos: tan solo dos buckets y una jaula antivuelco con homologación de la FIA.
Este Škoda ha sido rebautizado con cariño como “CitiGo-Go” por sus creadores, Darkside Developments, un taller con sede en Reino Unido especializado en potenciar bloques diésel
Darkside Developments, el taller encargado de esta preparación, tiene una larga reputación a la hora de extraer el máximo rendimiento de los motores TDI del Grupo Volkswagen con la idea de convertirlos en propulsores aptos para competir. Como ya te habrás imaginado, eso es precisamente lo que se ha hecho en este CitiGo: el motor de origen 1.0 MPI de gasolina de tres cilindros ha sido reemplazado por un bloque 2.0 TDI (CFHD) de cuatro cilindros. Con los ajustes pertinentes, puede entregar un total de 366 CV y 563 Nm.
Eso se consigue gracias un turbocompresor Garrett más grande, un escape personalizado, un kit de óxido nitroso y muchos otros componentes que puedes ver con detalle en su web. La transmisión queda a cargo de una caja de cambios AWD 02M con las relaciones del SEAT Ibiza Cupra TDI (6L), vinculada a una configuración Haldex en la zaga, y luego rematada con unos diferenciales Quaife de deslizamiento limitado delante y detrás. Teniendo en mente su peso de 1.160 kilogramos, tiene pinta de que se mueve con soltura.
De acuerdo con Darkside Developments, el sistema Haldex proviene de un Audi RS 4 (B5), mientras que otros componentes han sido tomados de Volkswagen, SEAT e incluso Porsche
Para aguantar el peso, la potencia y el par motor extra, el chasis también se ha actualizado meticulosamente para que el piloto pueda aprovechar todo el potencial del propulsor. La suspensión cuenta con muelles Eibach y varios componentes de Volkswagen Golf y de SEAT Ibiza, buscando una puesta a punto centrada en la pista. Además, hace gala de un bastidor auxiliar tubular personalizado y, del mismo modo, los frenos están compuestos por discos Brembo de mayor diámetro y pinzas Porsche (no se especifica modelo).
Según Darkside Developments, el Škoda CitiGo-Go sigue siendo legal para usar en las calles a pesar de su orientación como coche de pista. Eso quiere decir que aún tendrás la practicidad de su escueto tamaño para hacer tus recados metropolitanos antes de ir a la pista. Así que, si estás interesado en él, has de saber que está a la venta por 15.500 libras esterlinas (17.765 euros, aprox.), una tarifa muy lógica si tenemos en cuenta el alcance de las modificaciones. Piensa que un Škoda Fabia de acceso (95 CV) parte en 20.985 euros…
Además, Škoda nunca hizo una versión del CitiGo centrada en el rendimiento, a diferencia del Volkswagen Up!, que estaba disponible en forma GTI. Sin embargo, la compañía mostró un prototipo preparado para los rallies en 2012 que nunca pasó de la etapa de prototipo, lo que hace que este Škoda CitiGo-Go TDI de tracción total sea un espécimen tan raro como atrevido. ¿Cuántos coches de apenas 3,6 metros pueden hacer el 0 a 100 km/h en apenas cinco segundos? Lo más cercano a esto sería un Toyota GR Yaris, más o menos.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS