El Porsche Boxster, o como se denomina oficialmente a día de hoy, el Porsche 718 Boxster, es uno de los modelos más populares de la firma alemana. Sí, es cierto que al ser uno de los más accesibles económicamente hablando, sus ventas son más elevadas que el resto, pero tampoco es menos cierto que el Boxster es un automóvil muy interesante si lo que buscas es un descapotable de elevada calidad para salir los fines de semana a divertirte.
Hace nada menos que 25 años, Porsche presentaba en el Salón del Automóvil de Detroit de 1993 un coche con el que pretendía llegar a un mayor número de usuarios y lograr, así, un poco más de margen para actuar. Por aquellos años, aunque pueda parecer mentira, Porsche no estaba en un buen momento financiero y había que hacer algo para salir del atolladero o bien, pasar a la historia, no podía sobrevivir únicamente con el Porsche 911 y los modelos de motor delantero estaban “marcados” por los puristas aunque fueron la balsa sobre la que logró sobrevivir la marca, aunque fuera por los pelos.
Porsche apenas vendía un puñado de coches anualmente (cerca de 15.000 unidades) y con el nuevo modelo, uno que se colocaría como escalón de acceso a la gama y recuperaba el espíritu del famoso Porsche 550 Spider, se esperaba lograr los fondos suficientes para seguir con el desarrollo del catálogo. De hecho, es justo reconocer que el Porsche Boxster fue un coche clave en el despegue de la marca y que sin el Boxster tampoco habría existido el Porsche Cayenne, auténtico salvador de la marca.
Edición especial conmemorativa
La versión de producción del Porsche Boxster se presentó en Ginebra, en el año 1996 y hasta el día de hoy, ha sido un rotundo éxito. Han pasado ya 25 años de aquello y durante estas dos décadas y media, el modelo ha evolucionado mucho aunque, como se puede ver a simple vista, ha conservado muchos rasgos del original. Una evolución paulatina que lo ha convertido en uno de los coches más importantes de la marca rozando las 360.000 unidades vendidas.
Por ello, la marca pone en circulación una edición especial conmemorativa para los celebrar esos 25 años de historia. Bajo la denominación de Porsche 718 Boxster 25 aniversario, se presenta una tirada limitada 1.250 unidades para todo el mundo que toma como base de partida el Boxster GTS y que se inspira en el concept car que la marca usó para adelantar su llegada en 1993.
El Porsche Boxster fue un coche que además de una estabilidad económicas, abrió el camino a otros apartados que hoy son algo normal en los coches de Porsche. Quizá, lo más importante, fue el estreno del primer motor de seis cilindros refrigerado por líquido, motor que también equipó el Porsche 911 provocando una oleada de comentarios de todo tipo que hoy están totalmente olvidados. Solo hay que fijarse en el éxito de la marca y el creciente interés de los usuarios por la generación considerada como el “patito feo” del 911, la 996.
Suspensión adaptativa, reparto vectorial de par y diferencial de deslizamiento limitado
Como se ha comentado anteriormente, el Porsche Boxster 25 aniversario se basa en el GTS y esto significa que está animado por el bloque 4.0 de seis cilindros boxer y 400 CV. Casi el doble de potencia que ofrecía la primera generación del Porsche Boxster en primera instancia (con el tiempo fueron llegando más opciones). Se asocia a un cambio manual de seis relaciones, aunque se puede optar por el automático PDK. De todas formas, no importa el tipo de transmisión, por la velocidad máxima es de 293 km/h en todos los casos y el sprint se completa siempre en torno a los cuatro segundos con el paquete Sport Chrono.
Estéticamente se inspira en el concept car de 1993, luciendo un color plata metalizado para la carrocería junto determinados elementos en contraste, usando una nueva interpretación del color cobre que lucía el prototipo. Dicha tonalidad abarca cosas como las llantas, las entradas de aire tras las puertas y el labio delantero situado en la gran tona de aire del paragolpes.
También se inspira en el concept para el acabado del interior, que está rematado con piel de tonalidad rojiza (burdeos). La capota, de lona como en cualquier otro Boxster, puede ser roja o negra pero siempre con la inscripción “Boxster 25”. Los asientos tiene ajustes eléctricos, el volante está calefactado y los umbrales de las puertas también tienen la inscripción “Boxster 25”.
En cuanto a lo que no se ve a simple vista, hay que mencionar el sistema de suspensión adaptativa de la marca, Porsche Active Suspension Management, así como el sistema de reparto vectorial de par Porsche Torque Vectoring. El apartado técnico se remata con un diferencial de deslizamiento mecánico.
Desde 109.443 euros
Con una tirada limitada a 1.250 unidades, no cabe duda que se convertirá en un objeto de colección, pero para poder disfrutarlo mientras eso sucede, hay que desembolsar 109.443 euros para llevarse una unidad a casa. Si se quiere equipar el cambio automático PDK la tarifa asciende a 113.156 euros.
Ya está disponible en España, llegando a los concesionarios en el mes de marzo.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS