Todavía hay gente, y con razón, que sueña con el bramido del bloque V10 que daba vida al Lexus LF-A, quizá, uno de los motores que mejor suenan de los últimos años, junto, curiosamente, a otro V10, aunque en este caso, de origen alemán: el motor el Porsche Carrera GT. Sonidos que pasarán a la historia en pocos años, si todo sigue por el mismo camino, a no ser que sean sintetizados y usados en coches eléctricos, una idea que, por cierto, no se debería descartar.

Los coches eléctricos han llegado para quedarse y por supuesto, veremos como los deportivos también se transforman en coches eléctricos. La propia Lexus ya ha dado a conocer el reemplazo, aunque sea espiritual, del deseado LF-A, ha sido en formato concept bajo el nombre de Lexus Electrified Sport Concept y obviando que se trata de un prototipo de motor eléctrico, estamos deseando verlo hecho realidad. Más aún después de los rumores que han aparecido por la red de redes, pues según se dice, el Electrified Sport Concept podría tener un hermanito con motor de combustión, pero no uno cualquiera, ni siquiera un híbrido, los rumores dicen que contará con una versión animada por un bloque V8.

Así lo ha publicado la revista japonesa MAG-X, quienes también afirman que este propulsor V8 derivará del montado en el Lexus LC500 GT500, la versión de competición que ha participado en eventos como el Super GT japonés o las 24 Horas de Le Mans por poner unos ejemplos. Unas afirmaciones que, para ser sinceros, parecen cogidas con pinzas y más pensadas para crear repercusión y ganar lectores que una opción real. Quizá nos equivoquemos, pero si somos un poco coherentes, lo lógico sería que nunca llegara a existir una versión con motor V8 y menos aún, una con un motor derivado de competición.

Sí, han existido modelos “de producción” equipados con motores derivados de competición, no es nada nuevo, pero las cosas apuntan hacia la electrificación total del sector y Lexus trabaja, precisamente, en la electrificación total de la gama para los próximos años. Podría ser que a modo de despedida del motor de combustión y con la idea de ofrecer un coche de colección, lanzarán una edición muy limitada, pero de llegar a ser realidad, sería para cubrir el hueco que les quedó libre cuando la reglamentación de los Hypercar perdió la obligatoriedad de fabricar una versión para vías públicas.

De todas formas, en el hipotético caso de que se hiciera finalmente realidad, muy posiblemente no estaría disponible en Europa, ya que las próximas normativas de emisiones harán imposible que un motor de combustión de gran cilindrada se pudiera vender, porque no se puede acoger a la conocida “Enmienda Ferrari”, que permite a los fabricantes que produzcan menos de 1.000 unidades anuales, seguir usando motores de combustión. Sería un modelo destinado al mercado de Estados Unidos y a Japón, con una tirada muy limitada.

A Europa llegará, sin lugar a dudas, la versión de motor eléctrico, que promete una aceleración de 0 a 100 km/h en dos segundos y una autonomía de 700 kilómetros. Si hacemos caso a las declaraciones de la marca, cuando llegue a producción será un coche apasionante de conducir, porque será diseñado expresamente para eso. También será uno de los encargados de estrenar las baterías de estado sólido, una de las innovaciones más esperadas en cuanto a tecnología de coches eléctricos.