La firma de la estrella acaba de presentar la última incorporación a su creciente familia de coches eléctricos agrupados bajo la submarca EQ, es decir, totalmente eléctricos. La última incorporación es la Mercedes-Benz EQV, esencialmente una versión eléctrica de la Clase V. La casa germana ya vende la eVito (también basada en la Clase V) y la más grande eSprinter, aunque el EQV será la primera furgoneta eléctrica de Mercedes dirigida tanto a usuarios privados como comerciales.
Mercedes-Benz mostró una versión conceptual de la EQV anteriormente, en el Salón de Ginebra de este año, pero se podía ver que su llegada a producción no demoraría mucho más tiempo, algo que ha quedado respaldado ahora que el Salón del Automóvil de Frankfurt está a la vuelta de la esquina. Y Mercedes se adelanta a todas las demás marcas, describiendo a la EQV como el “primer MPV [Multi-Purpose Vehicle] premium totalmente eléctrico”. La palabra clave es “Premium”, ya que en ese segmento (MCV) ya hay versiones electrificadas.
Visualmente, la Mercedes-Benz EQV es prácticamente idéntica al prototipo. Un diseño elegante y equilibrado, que se mantiene fiel a las raíces de la Clase V de la firma germana, pero con algunos toques distintivos como los faros traseros con luces diurnas LED integradas. En el frente se distingue por un frontal negra que recuerda a la del EQC y unas llantas de aleación de 18 pulgadas específicas de este modelo.
La Mercedes-Benz EQV conserva la silueta, las dimensiones y las formas generales de la Clase V
La misma historia en el interior, donde la EQV comparte las formas con el coche mostrado en Ginebra. El habitáculo tiene capacidad para hasta siete u ocho pasajeros, dependiendo de la configuración de los asientos. También hay detalles decorativos interiores dorados y azules. Curiosamente, no hay un botón de arranque, sino una llave tradicional, lo cual es bastante sorprendente en un vehículo totalmente eléctrico. Alguien ha querido ahorrarse costes en eso.
La autonomía oficial de la Mercedes-Benz EQV es de hasta 405 kilómetros con una carga completa, de acuerdo a los datos provisionales (no homologados). La energía queda almacenada en un paquete de baterías de iones de litio de 90 kWh (útiles) montado bajo el piso para no mermar el aspecto dinámico y aprovechar el máximo espacio interior. Se puede cargar desde un 10 % de capacidad hasta un 80 % en menos de 45 minutos a 110 kW, que es mucho. Al igual que los recién presentados A 250 e y B 250 e, hay levas tras el volante para controlar la intensidad con la que actúa el sistema de frenado regenerativo, ya que la caja de cambios es de reducción con velocidad única.
Los clientes deberán elegir entre dos longitudes diferentes: 5.140 milímetros y 5.370 mm, con una distancia entre ejes de 3.200 o 3.430 mm, respectivamente
A bordo hay un cargador de 11 kW que permite la carga tanto en un enchufe doméstico como a través de una toma Wallbox o en puntos de carga rápida. En el mejor de los casos, una carga completa podrá tomar 10 horas. La marca destaca que, a través de la plataforma Mercedes me Charge, el cliente tiene acceso a la red de recarga más amplia del mundo, con más de 300.000 puntos en toda Europa. Tener acceso no implica que sea gratis.
La energía proviene de un solo motor-generador eléctrico en el eje delantero, con una potencia de 204 CV y 362 Nm. Mercedes no ha mencionado nada respecto a la aceleración, aunque la velocidad máxima es de 160 km/h. La EQV anuncia un consumo eléctrico de 27 kWh a los 100 kilómetros (dato provisional), aunque habría que ver cuánto se dispara esa cifra cuando va cargada con la masa máxima autorizada de 3.500 kilos.
La Mercedes-Benz EQV se ensamblará en la planta que la compañía tiene aquí en Vitoria, donde también se construyen las Vito y Clase V de combustión interna. Saldrá a la venta en 2021 a un precio inicial esperado de alrededor de 65.000 euros, y es poco probable que una versión menos premium llegue a los concesionarios a un precio más bajo, dada la disponibilidad de la eVito, más orientada al mundo comercial.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.Justo me surge la misma duda que planteas en el artículo, esos 405km de autonomía (creo que en ciclo NEDC) habrá que ver en cuantos reales se convierten en un uso normal con todos los pasajeros a bordo.
En cualquier caso parece que en breve los premium europeos van a tener más oferta eléctrica que la que pueda dar Tesla, era cuestión de tiempo
Mercedes no menciona en qué ciclo está medida la autonomía, aunque con 100 kWh es posible pensar que en condiciones ideales alcance esos 405 km. Otra cosa será con carga y en climas fríos, donde las celdas no dan lo mejor de sí y también hay que consumir energía en climatizar.
El dato de 405 kilómetros no es NEDC ni WLTP, viene dato por el reglamento UN/ECE R101 (https://publications.europa.eu/en/publication-detail/-/publication/f9bfb040-733b-4649-8d05-3655a57dd23e/language-es). Es, por tanto, un ciclo de conducción para laboratorios, pero estandarizado por normativa internacional. Dado que dispone de 90 kWh útiles, y que el consumo estimado es de 27 kWh/100 km, los 300 kilómetros debería hacerlos con relativa facilidad. El principal problema de este vehículo, más que el peso, es su aerodinámica. Sé de buena tinta que una V 300 d puede gasta lo mismo que un turismo con el limitador a 100 km/h, muy poquito, a ritmo constante. Si te dedicas… Leer más »