El Lago Como se convirtió durante este fin de semana pasado en el centro de todas las miradas de los amantes de automóvil como objeto artístico, con la celebración allí del Concorso d’Eleganza Villa d’Este. Uno de los prototipos que más atención concentró fue el kode61 Birdcage de Ken Okuyama Design.

La empresa del creativo japonés, famoso por haber sido responsable del diseño del Enzo Ferrari, mostró allí esta barqueta que homenajea a un modelo histórico de la marca italiana del tridente, el Maserati Tipo 61, apodado “Birdcage”, jaula de pájaros en inglés. Este fue un automóvil deportivo producido entre 1959 y 1961 que incluso logró la victoria absoluta en los 1000 km de Nürburgring en dos ocasiones, en 1960 y 1961. Precisamente, durante este fin de semana pasado también tuvo lugar la celebración de las 24 horas de Nürburgring.

La inspiración para esta creación de Ken Okuyama también procede de otra reedición del modelo original, a modo de prototipo, fue producida por Pininfarina en el año 2005, bajo la denominación Maserati Birdcage 75th. Cabe apuntar que el propio diseñador japonés trabajaba por entonces para el carrocero italiano y fue el supervisor de este proyecto.

Ken Okuyama Design llevó su última creación al Concorso d’Eleganza Villa d’Este, un prototipo denominado kode61 Birdcage que llegará a producción, en tirada muy limitada, eso sí, como homenaje al Maserati Tipo 61 así apodado y que triunfó a principios de la década de los años 60 del siglo pasado en los 1000 km de Nürburgring

A diferencia de aquel, el kode61 Birdcage mostrado al público este pasado fin de semana carece de techo y parabrisas, adoptando, por tanto, la forma tradicional de una barqueta. Los abultados pasos de rueda del modelo son, quizá, la consecuencia más reconocible a primera vista de la influencia del deportivo original. Estos se complementan con un frontal y una parte trasera muy afilados. En esta parte posterior, dos salidas de escape ubicadas en una zona relativamente elevada revelan que cuenta con un motor de combustión interna.

Diversos detalles en negro en toda la zona inferior —paragolpes delantero, faldones laterales y difusor— contrastan con el blanco dominante en su pintura exterior, complementado con una franja azul que recorre longitudinalmente la parte central de su carrocería, para extenderse por toda la superficie del capó delantero. Las llantas recuerdan a las del Maserati MC20 actual. Sus puertas, que no se extienden de arriba abajo sino que solo ocupan la mitad superior del panel lateral, se abren oblicuamente hacia arriba. En la zona cercana a la bisagra, justo tras los pasos de rueda delanteros, el kode61 Birdcage exhibe tres pequeñas aberturas que lo emparentan con los modelos actuales de Maserati. Su interior continúa con el aire retro transmitido por su carrocería. Cuenta con una instrumentación analógica y tan solo una pantalla orientada hacia el lado del pasajero.

Más allá de saber que dispone de un motor de combustión interna, no conocemos más detalles técnicos sobre este prototipo que, a diferencia de muchos de los mostrados en el Concorso d’Eleganza Villa d’Este, sí llegará a producción, aunque en una limitadísima tirada. No se ha informado tampoco acerca de cuántos ejemplares saldrán de la planta de japonesa de Yamagata donde serán fabricados a mano. Por supuesto, tampoco tenemos información acerca de su precio, que habrá de ser elevadísimo.

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