Hace muy poco desde que nos hicimos eco de la nueva gama de Ford Mustang, y ahora Ford nos trae un nuevo modelo orientado a su uso en circuito. A la escueta gama en la que se encuentran el Ecoboost, como versión básica, y el GT, como versión superior con su V8, se suma un nuevo modelo por encima de ambos. Legal en la calle y preparado para el circuito, estas son las credenciales del nuevo Ford Mustang Dark Horse que viene cargado de equipamiento racing.
Como ya vimos, la nueva gama del Mustang se sigue basando en la plataforma anterior, pero eso no significa necesariamente que no vaya a haber novedades. En este caso se trata de una buena vuelta de tuerca más radical de la variante GT, pero sin la ayuda de Shelby en esta ocasión. Este mantiene el V8 Coyote de 5.0 litros de Ford, pero ha sido dotado de un nuevo cigüeñal forjado, acompañado de las bielas del Ford Performance Mustang Shelby GT500 de 760 CV, que son más que suficiente para asimilar sus 500 CV. Además, se le han instalado árboles de leva más agresivos y dos cuerpos de mariposa de admisión en lugar de uno, para mejorar la capacidad de aspiración de aire. Esto lo hace el Ford Mustang V8 más potente hasta la fecha sin ayuda de ningún tipo de sobrealimentación.
Con la vista puesta en el circuito, esta versión incluye un radiador del anticongelante más ligero con ventiladores más potentes, un radiador para el aceite del motor y un radiador para el aceite que lubrica el diferencial de deslizamiento limitado. Por su parte, las cajas de cambios son las mismas que ya vimos en el resto de la gama Mustang, pero si se elige la transmisión manual de seis velocidades incluirá con un radiador de aceite para la caja de cambios, muy útil a la hora de transferir toda esa potencia a las ruedas. El pomo de cambio ha sido sustituido por uno de titanio impreso en 3D para que tengamos claro que no es un Mustang cualquiera.
El Mustang de los que buscan una alternativa americana al BMW M4 Competition
Este modelo viene acompañado de mejoras en el chasis de cara a su rendimiento en circuito, como una barra estabilizadora trasera más gruesa y unos amortiguadores delanteros más duros. El chasis se ha reforzado con una barra de torretas delantera y un refuerzo trasero “K”, que ancla en el punto más alto posible de las torretas traseras y en el más bajo. La frenada corre a cargo de Brembo, con unas pinzas de seis pistones y un diámetro de disco de 353 mm refrigerados por unos conductos específicos en el paragolpes delantero. Las llantas de 19 pulgadas han aumentado en anchura, alcanzando las delanteras las 9,5 pulgadas y las traseras las 10 pulgadas.
Por si todo esto no fuera suficiente, ofrecen un paquete adicional denominado Handling Package. En este paquete se incluye un nuevo alerón trasero, muelles más duros de suspensión y estabilizadoras más duras en ambos ejes. Por otra parte, las llantas crecen aún más, hasta las 10,5 pulgadas delante y las 11 pulgadas detrás, y son calzadas con neumáticos Pirelli Trofeo R. Como opción y pasando por caja se pueden instalar llantas de fibra de carbono, por primera vez en un Mustang que no lleva la forma de Shelby.
Además de por las llantas, este Ford Mustang Dark Horse se puede distinguir estéticamente por los grupos ópticos oscuros, la parrilla en negro brillo con detalles únicos y un lip más prominente. Las taloneras más grandes y el difusor trasero acompañado de cuatro colas de escape oscuras terminan de completar la estética imponente de este Mustang. Si sois observadores quizá os hayáis percatado de la nueva insignia trasera. Joel Piaskowski, director global de diseño de Ford, dijo: “Esta es la primera vez para Mustang que tenemos un caballo mirando hacia adelante. Es agresivo, un poco siniestro y viene de las sombras de frente para ganar”. Toda una declaración de intenciones para sus competidores.
Es de agradecer que alguien siga apostando por un motor atmosférico acompañado de una caja de cambios manual
Este modelo recibe un color exclusivo, el Blue ember, un azul metalizado que emite brillos dorados al recibir la luz del sol. También habrá una variedad de colores y diseños basados en vinilos para este muscle car. El interior continúa con la temática del exterior, con un volante de aro grueso y ligeramente achatado en su parte inferior, acabado en piel con las costuras en azul. El azul se utiliza también para los cinturones y el resto de costuras, acompañados de las molduras en Black alley en sustitución de las de aluminio cepillado que instala la versión V8. Un paquete adicional denominado “Dark Horse” incluye asientos en color Deep Indigo Blue con un patrón de perforación de la piel específico. Este modelo recibe un sistema de sonido Bang & Olufsen de 12 altavoces como equipo de serie.
Si te ha gustado este nuevo Ford Mustang Dark Horse prepárate porque Ford nos tiene preparadas otras dos versiones de emociones fuertes. Una de ellas será la versión Dark Horse S, que es como esta pero orientada totalmente a los track days, prescindiendo de todo lo superfluo e instalando una jaula antivuelco con certificación FIA, un asiento y volante de carreras, y algún otro detalle por confirmar. La otra versión se denomina Dark Horse R, se basa en el modelo del que hemos hablado en este artículo pero instalando una batería para aumentar su autonomía, convirtiendo este Mustang en un híbrido de alguna manera. Veremos la instalación de este último, ya que la plataforma no es la más adecuada para ello.
Ford reclama su posición entre los deportivos americanos con el Ford Mustang Dark Horse, el Mustang de circuito que sin ayuda de Shelby pretende luchar cara a cara contra los deportivos europeos.
Francisco Javier Rodriguez
En la época en la que pasaba el día dibujando coches, alguien me preguntó: ¿pero a ti te gusta más la mecánica o la carrocería de los coches? Esa misma semana leí el Manual del Automóvil de Arias Paz. Tenía 14 años, esa simple pregunta es la razón por la que estoy aquí, desde entonces no he parado de aprender sobre lo que se convirtió en mi pasión.COMENTARIOS