A primera hora de la mañana empezó una fiesta en la fábrica de Solihull (Reino Unido) de Jaguar Land Rover. Estaban invitados 700 empleados que trabajan o han trabajado en la fabricación del Defender durante los últimos 68 años. Han presenciado el montaje de la última unidad, un Defender 90 Heritage Soft Top. Para los no familiarizados con la nomenclatura, carrocería corta, aspecto retro, y con techo de lona textil.

Se trata de la unidad número 2.016.933, con destino al museo de Jaguar Land Rover

La línea de producción vio salir al último Defender, pero no significa el final en un sentido estricto. Se aprovechará la cadena existente para restaurar Defender (o Land Rover Series si son anteriores a 1990) de cualquier lugar del mundo. Quedará bajo la responsabilidad de 12 empleados que acumulan 14 años y 4 meses de experiencia media. Uno de ellos, Tony Martin, lleva trabajando “toda su vida” en Solihull.

El Defender ha sido víctima de las normativas, pues ya se había quedado obsoleto, y por ser un modelo muy caro de fabricar. Utiliza muchas piezas de aluminio y requiere 56 horas de mano de obra por unidad, frente a las 48 horas que precisa un Discovery Sport. No todo el proceso de montaje se podía automatizar con robots. Al que quiera visitar la fábrica sin salir de casa, puede hacerlo por Internet, con fotografías a 360 grados.

Cada Defender consta de 7.000 piezas, de las cuales, dos han permanecido en producción desde el principio: los anclajes del capó y una barra del chasis. De la cadena de producción había salido una unidad cada cuatro minutos. Sus últimos meses de vida han tenido un buen éxito comercial, sabiendo la gente que iban a dejar de fabricarlo. Todavía no se sabe cuál será su sucesor.

La fiesta ha sido por todo lo alto. Han desfilado ante los empleados 25 unidades históricas, empezando por el viejo Huey. Se trata del primer modelo pre-serie de 1948, con la matrícula HUE 166. Curiosamente, el último modelo tiene matrícula H166 HUE. Algunos empleados han tenido varios familiares trabajando en el Defender, de hecho, se consideran como parte de una gran familia.

También queda en la fábrica una réplica de la cadena de montaje de 1948, visitada por 10.000 personas a lo largo de 2015. Si algún día pasáis por aquel país, tenéis un punto de peregrinaje obligatorio. Pocos modelos pueden jactarse de haber estado en producción tantísimos años con o sin cambios tan leves.

Esta obra, cuyo autor soy yo mismo, se publicó el 29 de enero de 2016 bajo una licencia de Reconocimiento 4.0 Internacional de Creative Commons.