El Mini original –que no MINI– fue construido por British Motor Corporation y vendido con una insignia de Austin o Morris. Poco después, la leyenda de las carreras John Cooper utilizó sus conocimientos de ingeniería para transformarlo de un héroe local hacia un icono global. David Brown Automotive, o DBA para los amigos, hace un sentido homenaje al vehículo con el Mini Remastered Oselli Edition.
Construido en colaboración con el especialista en personalización Oselli, que ha preparado coches Mini y MG clásicos para uso en competición desde la década de 1960, la producción se limitará a solo 60 ejemplares. Será así en honor al 60 aniversario del Mini. Sin embargo, no será barato, ya que el trabajo que hay detrás de cada uno de ellos es… impresionante, por no decir una palabra malsonante. Porque en esta ocasión, la atención por el detalle queda completamente patente.
El Mini Remastered Oselli Edition está impulsado por una versión optimizada del motor de gasolina de cuatro cilindros BMC A-Series, ampliado de 1.275 a 1.450 cm3 y completado con componentes internos de competición. Las mejoras incluyen un cigüeñal reforzado, pistones y bielas forjadas y un árbol de levas preparado para soportar un “alto par”. El bloque está rematado con una culata pulida, un par de carburadores SU y un sistema de escape de flujo más libre (y más melódico).
David Brown Automotive sorprendió a propios y extraños cuando mostró en el Top Marques de 2014 celebrado en Mónaco el Speedback GT, una reinterpretación moderna del Aston Martin DB5
El resultado son 127 CV a 6.200 RPM y 153 Nm a 4.500 RPM, y todo va directamente a las ruedas delanteras gracias a una caja de cambios manual de cinco relaciones completamente nueva. En consecuencia, el sprint de 0 a 100 km/h del pequeño urbanita inglés cae hasta los 7,8 segundos y debería ser soportable conducir en la autopista. Alternativamente, se puede optar por una transmisión automática de cuatro velocidades en una configuración para el propulsor de 1.380 cm3.
El contexto es útil: el Mini se retiró en el 2000 con una versión de 1,3 litros con inyección de combustible, 63 CV y 95 Nm. Muchas unidades construidas en las décadas de los 60 y 70 en cambio venían con un motor de 848 y 998 cm3 con una potencia de hasta 40 CV y 68 Nm. O dicho de otra manera, 127 CV y 153 Nm es una gran cantidad de energía para un Mini añejo. Y aunque también es sustancialmente más pesado –620 vs. 1.050 kg–, continúa moviéndose con una gran soltura.
Gran parte del aumento de peso del Mini Remastered Oselli Edition de DBA radica en sus componentes (de mucha mayor calidad) y su equipamiento (notablemente más completo)
Para que la dinámica de conducción resulte excelente, el Mini Remastered Oselli Edition de DBA cuenta con otros componentes igualmente dedicados, tales como un juego de frenos de alto rendimiento firmados por AP Racing, una suspensión Bilstein orientada a las pistas y un diferencial de deslizamiento limitado. Nuestro protagonista también viene con llantas más grandes –de 13 pulgadas el lugar de 10”– envueltas con neumáticos aprobados para ir a alta velocidad con seguridad.
Por fuera, este Mini tiene todo para hacerte sonreír. Los gráficos exteriores están pintados a mano y el color de la carrocería puede contrastar con ellos. Las tonalidades principales son Old English White y Carbon Grey, que se pueden combinar con acentos en Competition Red, Royal Blue o Heritage Green. El “60” en la parrilla hace referencia a las seis décadas desde que se hizo el primer Mini, y también se incluyen luces LED con pilotos auxiliares integrados como la versión de rallies.
DBA fabricará cada unidad a mano en su fábrica de Silverstone, antes de trasladarlos al taller de Oselli en Buckinghamshire para ajustar el propulsor y todas las mejoras que atañen a la conducción
En el interior, DBA ha añadido asientos deportivos para los pasajeros delanteros, un volante Sabelt tapizado en Alcántara y un sistema de infoentretenimiento Pioneer con conectividad Bluetooth. De serie, la dirección es asistida, hay un par de puertos USB, aire acondicionado (que, curiosamente, pasa por unas toberas de aire que parecen de un Mercedes-Benz) y las ventanillas son de accionamiento eléctrico. Eso sí, se mantienen los diales clásicos que te trasladan a otros tiempos.
Como decíamos más arriba, DBA construirá únicamente 60 unidades numeradas del Mini Remastered Oselli Edition, y las entregas están programadas para comenzar a principios de 2022. El precio de partida ronda las 98.000 libras esterlinas, unos 114.000 euros al cambio actual. Aunque parezca una burrada, hay que tener en cuenta que cada ejemplar requiere al menos 1.000 horas de trabajo hasta lucir como la unidad de las fotografías. Y si el dinero no es un problema, ¿por qué no?
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS