Siempre que pensamos en un roadster ligero nos viene a la cabeza el “todopoderoso” Mazda MX-5, pero desde Italia surgió en 1995 una opción diferente: el Fiat Barchetta. Este modelo italiano se desarrolló haciendo uso de una versión evolucionada de la plataforma del Punto de primera generación.
Este modelo fue diseñado en el Centro Stile Fiat por Andreas Zapatinas desde el inicio del proyecto (en 1990) hasta 1993, cuando fue destinado como jefe de diseño a Alfa Romeo, dejando en manos de Alessandro Cavazza el diseño del coche más peculiar de la firma italiana. Decía que este es uno de los pocos modelos que podían rivalizar con el Mazda MX5, por precio y prestaciones.
Este también era un roadster relativamente ligero y pensado para lograr sensaciones. La diferencia que les hace ser completamente diferentes es la arquitectura del vehículo; mientras el japonés equipa un motor delantero con propulsión trasera, el Italiano era una modificación profunda del Punto, por lo que mantenía su tracción delantera.
Detalle interesante del Barchetta es que solo podía ser escogido con un propulsor 1.8 (1.747 centímetros cúbicos, en Alfa Romeo sería un 1.75 o 1.750), capaz de proporcionar 130 CV a 6.800 rpm. Este fue el primer motor de la marca de Turín en equipar distribución variable en una culata con 16 válvulas.
Sus prestaciones no son brillantes, a pesar de mantenerse en un peso de 1.056 kg, con una aceleración desde parado de 8,9 segundos necesarios para alcanzar los 100 km/h y una velocidad punta de 190 km/h. Sin duda este es un modelo concebido para aportar placer de conducción sin estridencias.
El Barchetta puede que sea uno de los modelos más desconocidos de los últimos tiempos en la marca italiana y aunque poco tenga que ver es el predecesor natural del actual 124 Spider. Se trata de un modelo que ha pasado sin pena pero sin gloria del que no es fácil ver unidades. En este momento están “pasando por el purgatorio” (momento en el que menos vale un coche) con unos precios que oscilan entre los 2.000 y 6.000 euros, casi todos de las últimas unidades.
Quizá no sea la mejor inversión, ni la más lógica, pero puede ser una forma interesante de hacerse con un biplaza descapotable para disfrutar de nuestras carreteras favoritas los fines de semana sin caer en gastos excesivos.
Carlos Pascual
El olor a lubricantes y gasolina quemada han atraído a Carlos desde su niñez, por ello decide consagrar su vida a los coches: una forma de comunicarse, de disfrutar, de vivir.No me llegó a encandilar, lo que se dice a encandilar, a pesar de que suscitara sensualidad a raudales. A lo mejor faltó una chispa de carácter y descaro en tan zalamera pieza.
Un coche de cuando para mi, FIAT, tenia cierto encanto, aun conservaba el panda de 1ª generación, los brava y bravo empezaban a hacerse notar en las carreteras….
lastima que no fuera un coche muy fiable en cuanto a temas de corrosión, a nivel de chasis o problemas electrios, pese a todo si se dispone de tiempo y dinero puede ser un descapotable perfecto para los fines de semana…
una duda ¿Llego a montar ABS o AIRBAGS?
Buenas Sergio. Efectivamente, montaba ABS y airbag de conductor y pasajero.
El restyling no le sentó muy bien a mi juicio..
Pues que queréis que os diga. A mí es un coche que me encanta. La estética era y es perfecta para un coche de esta concepción.
Todavía veo alguno por donde vivo y aún me hace girar la cabeza. Quizá no sea el mejor a nivel de chasis o prestaciones, pero el plus de su diseño suple sus carencias.
Cierto es que luchar contra el Mx5 es una tarea que muchos han intentado y ninguno ha logrado conseguir vencer. Pero éste sería tal vez el rival de aquella época.
Buenas German. Cierto que en cuanto a precio fueran rivales, pero en arquitectura son muy diferentes. Tal vez si a “Toyobaru” se les ocurriera descapotar su creación, podrían competir con el MX-5 actual.