El Peugeot 504 hizo su primer acto de aparición en el salón de París de 1968, un coche que se lanzó al mercado para reemplazar al 404 y no solo resultó ser un coche espectacularmente fiable –de los que ya no hay–, también un enorme paso al frente para la marca. Era un Peugeot en toda su esencia –un Peugeot de entonces, claro–, es decir, algo conservador técnicamente, pero muy versátil y un gran rutero, pero escondía algunas novedades dentro de la compañía.
Por ejemplo, era el primer Peugeot que no usaba faros circulares y destacó por un frontal cuyos faros trapezoidales, le otorgaban una mirada con bastante carácter. Ese frontal se combinaba con una trasera que, en su parte, final, destacaba por contar con una ligera caída que aligeraba mucho la vista de perfil. Dos soluciones imaginadas por Pininfarina –más concretamente, por Aldo Brovarone–, que supusieron un enorme cambio con respecto al Peugeot 404 y que, al menos en lo que respecta al frontal, influyeron en todos los modelos de la marca que llegaron después.
Si por algo es famoso el Peugeot 504, es por su irrepetible robustez, una característica que provocó que fuera un coche tremendamente popular en el norte de África, donde era de lo más normal ver taxistas a los mandos de un Peugeot 504 –sí, también del Mercedes W123–. Pero no solo fue un coche de éxito en África, en Europa, hasta finales de 1976, se fabricaron 1,6 millones de unidades.
En España, el Peugeot 504 se comenzó a venderse en 1977 y lo hizo con una versión, el 504 GL, que en Francia se comercializaba desde 1973. No era, sin embargo, el mismo Peugeot 504 GL francés, sino que era, al parecer, una especie de mezcla entre el 504 GL y el 504 TI. Luego llegaron, los 504 TI y 504 Diesel, todos ellos fabricados en Vigo, en la factoría de Citroën. Su paso por España, todo sea dicho, fue efímero, pues se fabricó hasta 1980, cuando dejó su lugar al Peugeot 505.
Algunos detalles que destacaba en las pruebas de la época, era su tratamiento anticorrosión y la protección de “tectyl” en los bajos –Tectyl es una empresa especializada en productos anticorrosión–, lo que permitía que fuera un coche bastante duradero. También se destacó que montaba de origen un parabrisas laminado y la introducción de zonas de absorción de impactos en caso de accidente, tanto delante como detrás.
El Peugeot 504 todavía mantenía la clásica configuración de motor delantero y propulsión. Los motores disponibles –por lo general, en Europa al inicio de su producción– fueron un 1.8 con carburador y 80 CV, o bien, 96 CV con inyección. No obstante, en el momento de su producción, Peugeot todavía usaba la normativa SEA para la medición de potencia y sus cifras eran más altas, entre 87 y 103 CV –la normativa SAE americana, se medía casi sin accesorios –se quitaba el filtro de aire, el silenciador, el alternador y el ventilador–.
Más adelante llegó el motor diésel de 2,2 litros y 65 CV, desapareció el motor de 1,8 litros y se introdujo un dos litros con dos niveles de potencia: 92 y 103 CV, apareció la carrocería familiar, un eje trasero rediseñado…
El Peugeot 504 se fabricó en Francia entre 1968 y 1983; en España entre 1977 y 1980; en Kenia entre 1975 y 2004; en China entre 1989 y 1997; en Argentina entre 1969 y 1999; en Nigeria entre 1975 y 2006; en Sudáfrica entre 1970 y 1985 y en Taiwán entre 1979 y 1984.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".Increíble, no sabía que Taiwán inventase el automóvil, allá por 1879, y que su primer modelo , el 504, estuviese en producción por mas de 100 años.
Interesante.😜