Coche del día: Intermeccanica Italia

Coche del día: Intermeccanica Italia

Un deportivo con figura italiana y corazón americano


Tiempo de lectura: 3 min.

Frank Reisner, el creador de nuestro de nuestro protagonista de hoy, el Intermeccanica Italia, era en la década de los 50 un soñador como otros tantos, apasionado por la automoción y con unas ganas increíbles de poder crear su propio modelo de coche cómo lo lograron hacer otros visionarios como Bizzarrini, o De Tomaso, entre otros. De origen húngaro, sus padres se trasladaron a Canadá con él cuando era tan solo un niño.

Años más tarde, y tras casarse, decide volver a Europa, en este caso a Italia. Es allí cuando empieza a moldear la idea de crear su propia empresa de fabricación de automóviles. Antes, durante algunos años, trabaja creando chasis destinados a coches de competición para una marca italiana. Para 1959 Reisner decide que es el momento de fundar su propia empresa en Turín, lugar donde residía.

Entre sus primeros proyectos destacan un monoplaza en unión con Puch, el cual montaba un propulsor de origen Peugeot. Más tarde diversas marcas le encargaron el desarrollo de otros vehículos, como el Apollo GT o el Omega, un deportivo concebido por un empresario estadounidense, aunque todos ellos no llegaron a comercializarse en serie por falta de apoyo económico.

Intermeccanica Italia Coupe 1

El Intermeccanica Italia es un compendio de dos mundos muy diferentes, Italia y EEUU, empleando lo mejor de cada uno de ellos para su creación

No es hasta 1966 cuando la marca italiana consigue recrear su primer deportivo y el protagonista de nuestra crónica, el Intermeccanica Italia. Bajo el mecenazgo Jack Griffith la idea era clara, crear un automóvil de diseño italiano y motor americano, ya que estos eran más fiables y gozaban de mayor simplicidad mecánica.

Con estas premisas nace el Torino, que después pasó a llamarse Omega, y en última instancia y antes de su comercialización, se bautizó como Italia. Si bien es cierto que se fabricaron unidades muy similares al Italia con los nombres de Griffith y Omega, no eran el mismo coche que el de Intermeccanica.

Del diseño de este deportivo con claras reminiscencias a los coches de la marca del cavallino se encargó Franco Scaglione, incorporando a la bella carrocería del Italia, un bloque de ocho cilindros en V de origen Ford que rendía una potencia de 355 CV, todo ello asociado a una caja de cambios manual de cuatro velocidades y propulsión trasera. Con una velocidad punta de 250 km/h era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 6 segundos.

Intermeccanica Italia Cabrio 3

Su carrocería fabricada por completo en acero se ensamblaba a mano. Su chasis de sección tubular era del mismo material. Componentes como el sistema de frenado o suspensiones eran al igual que su motor, de origen Ford. En el interior del Italia podíamos encontrar unas terminaciones con una calidad excepcional, gozando de unos asientos forrados totalmente en piel o extras de serie como los elevalunas eléctricos o el aire acondicionado.

El Intermeccanica Italia se produjo tanto en versión coupé como cabrio, fabricándose apenas unas 200 unidades de cada una de sus carrocerías entre 1967 y 1973. Tras la comercialización del modelo la marca se centró en otro tipo de negocio, la creación de réplicas.

Para ello Frank Reisner refundo la empresa, esta vez en EEUU, hasta 1982, cuando decide volver a Vancouver conociendo ya de primera mano el mercado yankee y fundando una nueva empresa, La Intermeccanica International Inc., especializada en réplicas. En 2001 el fundador y propietario Reisner falleció, por lo que su hijo Henry Reisner tomó los mandos de esta.

Intermeccanica Italia Cabrio 2

En la actualidad la empresa sigue centrada en recreaciones de dos modelos fundamentalmente, el Porsche 356, incluida una versión equipada con turbo, y el Volkswagen Kubelwagen. Nada o casi nada tiene que ver con los orígenes de Intermeccanica en sus inicios la actividad actual de la empresa, pero al menos quedan los vestigios de la marca en forma del Italia, de aquella gloriosa época del automovilismo.

Comparador de seguros de coche
COMPARTE
Sobre mí

J. Rubio

Soy un enamorado del motor en general y de los vehículos clásicos y motocicletas en particular. Dedicado al mundo de la automoción desde hace unos años, disfruto probando toda clase de vehículos y escribiendo mis impresiones y experiencias sobre ellos.

COMENTARIOS

avatar
2000
 
smilegrinwinkmrgreenneutraltwistedarrowshockunamusedcooleviloopsrazzrollcryeeklolmadsadexclamationquestionideahmmbegwhewchucklesillyenvyshutmouth
Foto
 
 
 
  Suscribir  
Notificar de


NUESTRO EQUIPO

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

Ángel Arias

La historia del automóvil está llena de grandes emprendedores, de ideas arriesgadas, curiosas casualidades, irreconciliables enemistades y muchos fracasos. Es un mundo intenso y fascinante del que muchos hemos quedado cautivados. Cualquier vehículo con un motor me parece interesante, ya sean motocicletas, automóviles, camiones, aviones o barcos; es estupendo sentir la brisa del viento en la cara sobre uno de ellos. Si estáis aquí es porque compartimos afición.

Alejandro Delgado

Jesus Alonso

Javier Gutierrez

Mauro Blanco