El FIAT Punto TD 60 S era un utilitario diésel un tanto atípico, ya que en su categoría, todos los rivales tenían motores atmosféricos, menos él. El Punto TD 60 S era el único utilitario con motor turbodiésel, a excepción del SEAT Ibiza, que tenía tres opciones diésel y dos de ellas sobrealimentadas –el diésel atmosférico de 64 CV, y los TDI de 90 y 110 CV, pero esos estaban destinados a otra categoría dentro de los utilitarios–. Sin embargo, la presencia del turbo no influía en la cifra de potencia final, ya que se situaba en la media, la presencia de la sobrealimentación buscaba ofrecer otro tipo de ventajas.
Allá por los años 90, los diésel empezaron a evolucionar de forma notablemente rápida y la inyección directa permitió anunciar cifras de prestaciones nunca vistas hasta la fecha, sobre todo en cuanto a par y consumos. Sin embargo, los utilitarios –o polivalentes, como se les llamaba antes–, no tenían el honor de ver en sus gamas las nuevas tecnologías, a no ser que fueras un modelo del grupo Volkswagen, en cuyo caso, eras un privilegiado. Por eso, la presencia del FIAT Punto TD 60 S resulta tan fuera de lugar, pues todos sus rivales, incluido el mismo SEAT Ibiza, empleaban la técnica más básica en la categoría.
El Punto TD 60 S presumía de un motor de cuatro cilindros y 1.698 centímetros cúbicos que, además, sumaba una inhabitual carrera corta de sus pistones –82,6 por 79,2 milímetros–. La culata tenía ocho válvulas y un solo árbol de levas, mientras que el turbo se combinaba con un sistema de inyección indirecta. FIAT anunciaba 63 CV a 4.500 revoluciones y 12 mkg a 2.500 revoluciones. Era el que más gastaba de su categoría, con 6,5 litros cada 100 kilómetros de media, pero gracias a sus 1.010 kilos de peso, las prestaciones eran muy dignas.
No había mejoras en las prestaciones del Punto TD 60 S por la presencia del turbo, pero sí había ganancia en cuanto al tacto general y cosas tan importantes como recuperaciones y adelantamientos
Los datos oficiales prometían una velocidad máxima de 155 km/h y un 0 a 100 km/h en 16,8 segundos, es decir, casi como todos sus rivales con motores atmosféricos. No obstante, donde el FIAT Punto TD 60 S despuntaba eran en recuperaciones y en adelantamientos, aunque según cuenta la prensa de la época, obligaba a “tirar” de cambio con asiduidad para peder mantener el motor en la “zona buena”. No obstante, aunque se trataba de un coche con una clara tendencia urbana, los recorridos por el centro de la urbe no eran su mejor baza, pues los consumos, por muy diésel que fuera, se disparabanhasta rozar los nueve litros.
El FIAT Punto TD 60 S era un coche llegó al final de la vida comercial del modelo italiano, casi cuando empezaba a necesitar un cambio, pues algunos de los rivales más duros habían lanzado renovaciones muy importantes, como el Renault Clio o el Peugeot 206. De hecho, se le notaba el paso de los años en detalles como el airbag del pasajero, que era un feo postizo frente al acompañante –un muy feo postizo–, o en detalles como el confort de marcha y los acabados, que a pesar de no ser malos, estaban claramente por debajo de sus principales competidores.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS