Si hay un vehículo al que le sobra glamur, ese es el que traemos hoy: el Mercedes-Benz 350SL. El descapotable del fabricante alemán, que debía ser el no va más en lujo y refinamiento en este segmento. Con líneas simples y sencillas, pero magistralmente dibujadas, se convirtió en el coche favorito de muchos actores, actrices y gente adinerada, no solo en nuestro continente, sino también en Estados Unidos.
Un modelo con las siglas “SL” pegadas a su trasero tiene que ser muy especial, aunque este modelo sea bastante diferente al vehículo que llevó en primer lugar ese nombre. De hecho, esta versión tenía que sustituir al anterior Pagoda de 1971, y mejorar en muchos aspectos. Lo primero que hizo Mercedes fue rediseñar el vehículo por completo, cambiando el diseño de su frontal, cambiando los faros redondos por otros rectangulares, pero manteniendo una gran parrilla central con el logo en el centro. En la trasera también hubo cambios profundos, dando un salto cualitativo en diseño, y modernizando la imagen de la marca.
Las dimensiones crecerían ligeramente, hasta los 4.390 mm de largo, 1.790 mm de ancho y 1.300 mm de alto, creciendo en longitud y anchura, pero bajando en altura respecto a la generación anterior. Por cierto, en Estados Unidos los faros eran dobles y circulares, y su longitud ligeramente diferente, debido a la necesidad de añadir unos paragolpes más protuberantes, debido a las normativas americanas.
El motor que equipaba era un V8 de 3.499 cm3, con inyección electrónica que rendía 200 CV a 5.800 rpm, y un par máximo de 286 Nm a 4.000 rpm. A lo largo de los años la potencia fue variando, debido a las diferentes normativas que regían en la época. Su motor se unía a una caja manual de 4 marchas, o automática también de 4 velocidades, llevando la potencia a las ruedas traseras, como era hasta hace poco tradicional en la casa.
Con todo esto, pesaba 1.585 kg y conseguía acelerar hasta 100 km/h desde parado en tan solo 8,8 segundos con el cambio manual, dos décimas más si era con la caja automática. Si continuaba acelerando, conseguía alcanzar los 210 km/h de máxima (205 km/h con cambio automático), lo suficiente para despeinarnos.
Hubo versiones cerradas llamadas SLC, que no consiguieron tanto éxito, y diferentes motorizaciones que fueron renovándose con los años, hasta que en 1989 cesó su producción tras haber producido más de 237.000 unidades. Lo hemos podido ver en películas conducido por Richard Gere en “American Gigoló” (1980), Barbara Carrera como chica Bond en “Nunca digas nuna jamás” (1983), Steve Martin en “Tres mujeres para un caradura” (1991) y Sharon Stone en “Casino” (1995), así como en series de TV como “Dallas” o la más reciente “Fariña”, conducido por Sito Miñanco (Javier Rey) y su segunda esposa Camila Reyes (Jana Pérez).
Os dejamos con un vídeo -lástima, no tiene sonido- donde podréis ver como lo anunciaban en aquella época, o las pruebas que realizaban al coche.
Pablo Mayo
Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.COMENTARIOS