Aunque el mero hecho de contar con un Ferrari en el garaje ya supondría, para muchos de nosotros, sentirnos orgullosos como miembros de un selecto club, para el común de los clientes de Ferrari esto ya no es suficiente. “¿Voy a tener yo el mismo Ferrari que aquel?, home vaya”, diría uno de ellos si fuera oriundo de algún lugar cercano a donde escribo. En Taiwán, se diga como se diga, ya sea en mandarín o taiwanés, alguien pronunció hace poco una frase parecida. Imaginamos que la pronunciaría en inglés, italiano, o que estaría asistido por un traductor, porque en Maranello escucharon atentamente su voluntad y la transformaron en este Ferrari SP8, del que solo existirá una unidad.
No nos engañemos, a todas luces, lo que terminó por convencer a Ferrari para llevarlo a cabo fueron los dineros, cómo no, aunque no ha trascendido cuál ha sido el precio que ha pagado su dueño por esta creación. Lo que sí sabemos es que está construido sobre un Ferrari F8 Spider —361.000 euros de precio de partida—, que ha donado su chasis y sus elementos mecánicos para que el equipo del Centro Stile de los de Maranello, con Flavio Manzoni a la cabeza, elaborase una carrocería con un diseño único para este cliente asiático.
Ya desde el frontal son visibles los cambios implementados, puesto que los faros delanteros tienen unas formas un tanto diferentes. También la calandra adquiere un tamaño algo mayor, extendiéndose hacia los laterales del vehículo para mejorar el flujo de aire que alimenta sus radiadores. En la parte trasera, destacan unos pilotos tomados del Ferrari Roma, aunque con pantallas de nueva factura. Del mismo modo, este Ferrari SP8 cuenta con un parabrisas inspirado en el Ferrari 296 GTB, del que también adopta el tratamiento específico de su sistema de escape. Las llantas, por su parte, con sus cinco radios, son una aproximación moderna al diseño que equipaban modelos históricos, como el Ferrari F40.
No se ha alterado el propulsor del modelo de base, el Ferrari F8 Spider, por lo que cuenta con el conocido V8 biturbo de 3.902 cc de capacidad y 721 CV de potencia
No obstante, el cambio más importante consiste en la completa eliminación del techo duro retráctil que caracteriza al Ferrari F8 Spider, que motivó un rediseño del espacio situado directamente tras el habitáculo. Además, se hizo necesario invertir multitud de horas en el túnel de viento, junto con pruebas dinámicas en circuito, para conseguir que el nivel de ruido en su interior estuviera a la altura de lo esperado en cualquier producto marcado con el logo del cavallino rampante.
También merece mención el acabado exterior, consistente en el juego bitono de sus pinturas. Uno de los colores que exhibe, denominado Blu Scuro Stellato, ha sido desarrollado exclusivamente para este modelo. Se combina con el Argento Micalizzato, también creado para la ocasión, y que resalta las secciones de fibra de carbono en acabado iridiscente. En el interior, el azul marino, utilizado para la tapicería de Alcantara, es el color dominante, aunque también está presente el amarillo en algunas zonas, como en los bordes laterales de los asientos. Las alfombrillas son de sarga y tienen un efecto tornasolado.
Si no eres su dueño taiwanés, para poder contemplar en vivo y en directo este Ferrari SP8, el nuevo miembro de la serie One-off de los italianos, puedes acercarte al circuito de Mugello a partir del próximo 24 de octubre. Ese es el día en el que comenzará el evento Finali Mondiali de la marca italiana, que supone el broche final para la temporada de carreras de su departamento Corse Clienti.
David García
No conozco sensación mejor que la de un volante en las manos. Disfruto también con ellas sobre el teclado, escribiendo ahora para vosotros algo parecido a aquello que yo buscaba en los quioscos cuando era un guaje.COMENTARIOS