El Alfa Romeo Tonale iba a tener un hermanito norteamericano, siendo una de las pocas veces en las que un Alfa Romeo es “clonado” por otra marca. Anteriormente, los modelos de Alfa habían compartido plataforma, ocurrió en los 90 y a comienzos de la década de los 2000, pero nunca se había usado un modelo como base para realizar otro, aunque fuera destinado a otro mercado y luciera rasgos distintivos propios. Pero el Dodge Hornet, al que ya podemos ver en todo su esplendor, no esconde su origen y deja ver, claramente, que es un Alfa Tonale.

Sí, no es el único caso ni será el último, es la forma que tienen los grandes grupos industriales como Stellantis (y otros no tan grandes), para ahorrar costes y sacar el máximo provecho de las inversiones. En algunos casos, se trata básicamente del mismo coche, pero con pequeños cambios y los logotipos de otra marca, pero en este, al menos según afirma Dodge, no ocurre lo mismo. Los yankees han estado trabajando durante algún tiempo, para darle al Dodge Hornet una personalidad propia, y no nos referimos únicamente a los cambios estéticos, sino a su puesta a punto, a su tacto de conducción y a la sensación general que ofrece el modelo al conducirlo.

Dodge afirma que el nuevo Hornet será el vehículo utilitario compacto más potente y rápido por menos de 30.000 dólares y así han diseñado la gama del modelo y la propia imagen, que sigue manteniendo los rasgos del Alfa Tonale en la vista lateral, pero que cambia por completo tanto en el frontal como en la zona trasera, aunque en esta zona los cambios son mínimos (la firma lumínica y poco más). El habitáculo es un calco del visto en el Tonale, incluido el volante.

Muy Dodge en los detalles, pero sin el estilo del Tonale

Los cambios más notables que luce el Dodge Hornet se pueden encontrar en el frontal, es que es totalmente propio. Los faros, que tienen una forma externa similar, se ven diferentes al contar con una estructura interna propia, que se combina con un paragolpes y una calandra que no tienen nada que ver con el Tonale. Es la zona del coche “más Dodge”, al igual que el capó, que luce las dos características salidas de aire que se pueden ver en otros modelos. No tiene el estilo del Alfa Tonale, pero tiene una personalidad algo más macarra.

Atrás, los pilotos unidos en el centro del coche son los mismos que los del Tonale, pero su firma lumínica es diferente y además, se completan con el logo de la marca iluminado. No hay muchas diferentes en esta zona entre el yankee y el italiano, pero igual que el frontal, luce diferente, quizá sea la estructura interna de los pilotos, pero funciona.

Respecto al habitáculo, como ya se ha comentado, no hay cambios, todo es igual entre ambos modelos, aunque el Dodge Hornet tendrá detalles específicos, como cabría esperar, en forma de tapizados, logotipos y adornos varios.

Potencia y prestaciones, incluyen un híbrido

Estados Unidos tiene una forma muy particular de ver el automóvil, allí, coches con 150 CV se consideran poco potentes, mientras que en Europa, con 150 CV nos sobra en la gran mayoría de los casos. Y eso que nuestras carreteras son más complejas en cuanto a trazado que las suyas y en ocasiones, un poco más de caballaje nunca está de más. Por eso, allí, el Tonale, o mejor dicho, el Dodge Hornet, contará con dos opciones de motor que destacan por prestaciones en uno de ellos y por configuración en el otro.

Por un lado, el Dodge Hornet se venderá con un motor 2.0 turbo de cuatro cilindros, que promete “más de 265 CV” (no se han dado cifras exactas) y 400 Nm de par. El cambio es automático de nueve relaciones y está conectado a un sistema de tracción total. Por otro lado, el Hornet también contará con un híbrido enchufable, cuyo funcionamiento no tiene nada que ver con cualquier otro híbrido, en este caso, el motor eléctrico está destinado a mejorar las prestaciones y no a ahorrar combustible.

Este grupo motor se compone de un gasolina 1.3 litros turbo (de aluminio, construido en Estados Unidos) y un motor eléctrico, que pueden llegar a rendir, en conjunto, 288 CV y cerca de 520 Nm de par. La batería es de litio, con 15,5 kWh de capacidad y anuncia poco más de 48 kilómetros de autonomía eléctrica. Básicamente, en la media de lo que viene siendo normal, pero lo mejor es que, según cuenta la marca, tirando de las dos levas hacia el volante, se activa la función PowerShot, que añade 25 CV adicionales (durante 15 segundos y requiere otros 15 segundos de “descanso”) y permite completar el 0 a 100 km/h en 6,1 segundos. Este motor estará reservado para el Dodge Hornet R/T, la versión más prestacional de la gama.

Contará, por si fuera poco, con amortiguadores Koni, con amortiguador regulable en opción, los frenos son Brembo con pinza delantera de cuatro pistones y también dispondrá de vectorización de par. Dodge afirma que puede alcanzar elevadas cargas de aceleración lateral, llegando a 0,87 G para el Dodge Hornet GT (equipado con el 2.0 turbo) y a 0,90 G para el Dodge Hornet R/T.

Para rematar, y siendo algo muy yankee, el nuevo Dodge Hornet contará con toda clase de accesorios, desde suspensiones, llantas y gráficos para la carrocería, hasta escapes y piezas de alto rendimiento para el Hornet R/T. Incluso se ha recuperado la denominación Goes Like Hell, que se usó por primera vez en el Dodge Omni GLH y que, aunque se ha presentado como un ejercicio de estilo, muestra hasta donde se puede llegar con los accesorios disponibles.

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Dodge Hornet

Dodge Hornet GLH Concept

The Dodge Direct Connection performance parts brand will offer graphics to assist enthusiasts in customizing the 2023 Dodge Hornet GT.