Este Jeep Grand Wagoneer de 1989 cuenta con más de 700 CV, pero podría alcanzar las cuatro cifras de potencia

Este Jeep Grand Wagoneer de 1989 cuenta con más de 700 CV, pero podría alcanzar las cuatro cifras de potencia

Es un experimento que mezcla la condición de SUV premium original con el poder de los motores Hellcat


Tiempo de lectura: 3 min.

No son días precisamente inoportunos para hablar del HEMI V8, por las declaraciones de los directores ejecutivos, por el contexto político que le abre las puertas de par en par a su retorno. Sin ir más lejos, hasta nos animamos a aventurar un posible regreso de la RAM 1500 TRX, tal vez no como versión de serie, pues hay ya un sucesor en actividad y lo pasado, pasado, sino como alguna eventual edición limitada.

Pero eso es cosa de espíritu RACER aventura, sólo que… ¿Cómo no imaginarse un duelo entre la pick-up y este otro mutante americano? Un proyecto materializado hace unos años, pero que adquiere mayor valor con el Hellcat fuera de la órbita de Stellantis. Como la pick-up todoterreno, este SUV lleva debajo del capó el HEMI V8 de 6.2 litros sobrealimentado que envía a las ruedas más de 700 CV.

Ahora bien, el atractivo está en que cómo la personalización a la cual fue sometido este vehículo lo llevó a adoptar un poder que jamás había conocido en los años de su producción en serie. Dos épocas diferentes, dos conceptos diferentes que se entrelazaron porque alguien en Estados Unidos se encargó de hacerlo, para sorpresa de nadie. El resultado fue el denominado “Hellwagon”, un Jeep Grand Wagoneer modelo 1989 que originalmente ni por asomo salía con tamaña cifra de potencia.

“Hellwagon”, capaz de una potencia sin límites

El nombre que se le ha asignado al momento de su creación consumada en 2019 resume su mixtura. Se le retiró el AMC de 360 pulgadas cúbicas y se le instaló el 6.2, dando un salto radical de aquellos 140 CV que producía el 5.9 a los 707 CV que hacen que su realidad de SUV premium se viera totalmente alterada y distorsionada. Sobre este motor, una salvedad, pues si bien se trata de uno fabricado por la línea Hellcrate –es decir, línea de motores contemporáneos a nosotros– son en realidad versiones del Hellcat creadas para modelos clásicos de Jeep, Plymouth y Dodge.

¿Vale el experimento? Pues, al verlo en acción y al escuchar cómo rezonga por las salidas de escape, se nota que mola bastante. “Es demasiada diversión. Su 0 a 600 (mph) es brutal” dice Dennis Collins, jefe del proyecto, de la firma Collins Bros y cara del ciclo Coffee Walk, después de pisar el acelerador a fondo. En el episodio, hasta plantea un escenario en el que le debate no a una RAM TRX, sino a alguno de los superdeportivos italianos: “Imagina correr al lado de un Lamborghini, de un Ferrari o lo que sea”.

Hay en este Grand Wagoneer algunas joyitas más. Ya es una salvajada su desempeño con el HEMI 6.2, pero lo notable del trabajo de ingeniería es que es un ejemplar preparado para elevar mucho más su potencia máxima en caso de que se le aplique el motor pertinente y demás ajustes. Capacitado incluso para llevarlo hasta las cuatro cifras. Esto fue gracias a la selección de una caja automática con el TorqueFile de Chrysler, que le permitiría transmitir hasta 900 caballos, mientras que con su sistema de combustible sería posible que experimentara… ¡hasta 1.400 CV!

¿Qué es de la actualidad de este mutante americano? No lo sabemos, pero vaya que tuvo sus minutos de adrenalina al volante. Les recomiendo verlo promediando el séptimo minuto del video. Créditos al canal Coffee Walk en Youtube.

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Mauro Blanco

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