El otrora dirigente de la Alianza Renault Nissan Mitsubishi, Carlos Ghosn, continúa su via crucis judicial en el país del sol naciente. El ex ejecutivo está dándose de bruces contra la realidad de un sistema judicial nipón que no se anda con chiquitas y ofrece menos garantías a los reos. Hace horas hemos sabido que se ha aprobado su segunda puesta en libertad bajo fianza tras apoquinar 500 millones de yenes, al cambio 4.019.000 euros, la mitad de la primera vez.

Los 10 capítulos anteriores pueden ser un poco tediosos de leer, así que me vais a permitir hacer una síntesis de lo que ha ocurrido hasta ahora. El 19 de noviembre de 2018 aterrizó Ghosn en su avión privado en Haneda (Tokio) e inmediatamente fue detenido y puesto a disposición de las autoridades niponas, acusado de irregularidades financieras. Junto a él fue detenido Greg Kelly, uno de sus estrechos colaboradores.

Primero fue acusado por ocultar unos 74 millones de euros en pagos de dudosa legalidad desde 2011, lo que supone dos acusaciones, una por un periodo y otra por otro. En segundo lugar, se le acusó de usar dinero de la empresa para cubrir un pufo financiero personal por haber invertido en Lehman Brothers -uno de los bancos que cayó en el crac de 2008- de 14,5 millones de euros.

Por cada acusación se produce un arresto, o en la práctica la extensión del primer arresto. Si no, podría haber sido liberado a los 22 días

Después de dos peticiones infructuosas de salir libre bajo fianza, y tras fichar a un abogado de los mejores, se le concedió la libertad bajo fianza tras soltar 1.000 millones de yenes (7,8 millones de euros entonces). Ghosn salió libre el 6 de marzo disfrazado como empleado de mantenimiento, con mascarilla en la cara, gafas, gorra, mono y hasta peto reflectante. Casi cuela, pero los reporteros gráficos captaron el momentazo.

Durante su primer arresto, los interrogadores se han empleado a fondo para hacerle cantar, pero Carlos Ghosn ha aguantado la presión. Ha sido interrogado todos los días, hasta sábados y domingos, y durante horas, lo cual puede romper mentalmente a una persona aunque no se usen métodos de interrogatorio tales como palizas o torturas. Los abogados le recomendaron callarse o salirse por la tangente con los clásicos no sé, no me consta, no tengo nada que decir…

Ghosn ha perdido en prision 7 kilos, enfermo y ha salido visualmente desmejorado

Carlos Ghosn aceptó condiciones muy restrictivas para poder estar en libertad condicional y poder preparar su defensa, así como ver a los suyos. Sin pasaporte, vigilado con geolocalización, con comunicación limitada con el exterior y sin acceso a un ordenador, salvo que vaya al despacho de sus abogados. Así el sistema legal pretende evitar que se destruyan pruebas o que le dé por fugarse.

En una primera declaración ante el juez, de la que solo quedan unos dibujos como imágenes, Ghosn se declaró inocente de todas las acusaciones tras 50 días detenido. Pensaba dar una rueda de prensa el 11 de abril para explicar su visión de los hechos, pero al ser arrestado nuevamente el 4 de este mes preparó una grabación que fue hecha pública el día 9 en su recién estrenada cuenta de Twitter, @carlosghosn. Se expresa en inglés y le han traducido al japonés, no sigue ni ha respondido a nadie.

https://t.co/VAa5F11Uwd

— Carlos Ghosn カルロス・ゴーン (@carlosghosn) April 9, 2019

En este vídeo de 7 minutos y pico Ghosn traslada unas ideas muy simples: es inocente, ama a la compañía en la que ha trabajado 20 años y es víctima de un complot. Según su versión, le han traicionado aquellos que se sentían amenazados por una mayor integración de Renault y Nissan, que ahora son compañías independientes pero parcialmente ligadas por un intercambio accionarial (Renault tiene el 43,4 % de las acciones de Nissan, Nissan el 15% de Renault). No dio nombres, pero todos los conspiradores son de Nissan.

La última acusación, por la que fue arrestado por cuarta vez (en la práctica, la segunda), en su domicilio, tiene miga. En teoría, Ghosn realizó un ejercicio de ingeniería fiscal para enriquecerse usando como tapadera el distribuidor regional de Nissan en Omán, Suhail Bahwam Automobiles. A través de la compañía controlada por un amigo suyo, Suhail Bahwan, Ghosn trincó presuntamente cinco millones de dólares de un fondo de contingencia a disposición de su cargo que se justificaron como gastos de márquetin.

El dinero se habría utilizado para pagar parte del yate de Ghosn y para un crédito personal

La defensa de Ghosn ya ha puesto los 500 millones de yenes a disposición del tribunal. Como la Fiscalía -que le acusa- ha apelado, la puesta en libertad puede tardar más en ser liberado o permanecer bajo arresto de nuevo. Las condiciones para la segunda libertad bajo fianza son las mismas: no tocar nada y estar vigilado.

El arresto de Ghosn ya se ha convertido en un tema de la agenda del presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el primer ministro japones, Shinzo Abe. La mujer del ex ejecutivo, Carole Ghosn, pidio la intervencion de Macron en este proceso. Oficialmente el señor Ghosn -ciudadano frances- goza de presuncion de inocencia y proteccion consular, como si fuese cualquier otro hijo de la patria.

El juicio podría comenzar en otoño

Carlos Ghosn, con 65 años, se enfrenta a 15 años de cárcel en Japón. Fue desposeído de todos sus cargos en Renault, Nissan y Mitsubishi. Las compañías se intentan librar de pagarle una pensión vitalicia (según algunas fuentes, 765.000 euros al año) y parte de su salario de 2018. En teoría, tiene la vida solucionada aunque no vuelva a trabajar, pero si sale exonerado tras el juicio y limpia su imagen no serán pocas las novias que le van a salir en la industria, si pueden hacer frente a su salario y emolumentos.