El Salón del Automóvil de Ginebra no se celebrará en 2021, según ha dado a conocer la organización que la presenta todos los años en el recinto ferial suizo de Palexpo. El principal motivo reside en la difícil situación por la que está atravesando el sector de la automoción a causa del COVID-19, pues los expositores no tienen intención de llegar al público en marzo o abril del próximo año, según una encuesta que ha efectuado la propia organización.

Los organizadores han recalcado que las condiciones del evento no serían las adecuadas: “El sector de la automoción se encuentra actualmente en una fase difícil y los expositores necesitan tiempo para recuperarse de los efectos de la pandemia. Además, no es probable que la situación sanitaria actual permita la organización de un evento que atraería a más de 600.000 visitantes y 10.000 periodistas la próxima primavera”.

También han decidido vender los derechos de la exposición al propio recinto ferial (Palexpo), para asegurar la realización del salón de Ginebra más allá de 2021. A día de hoy es considerado el mayor evento del país y uno de los más importantes que hay en el sector europeo. A partir de ahora será Palexpo quien gestionará el evento, pero se calcula que el año que viene se perderán hasta 200 millones de francos suizos (188 millones de euros) al no llevarse a cabo.

Salón del Automóvil de Ginebra a medio montar (2020)

Sin embargo, el Salón también estaba negociando una financiación con el Cantón de Ginebra que ha decidido rechazar: una cantidad de 16,8 millones de francos (15,7 millones de euros) para suplir la pérdida que ha sufrido la organización este año, de 10 millones de euros. La financiación estaba sujeta a celebrar una nueva edición el año que viene y, al menos, devolver un millón de francos antes de junio. Este parece ser un problema más acentuado que lo que pueda pasar de aquí a un año con el virus.

Estaba previsto que se realizase este año, hasta que el 28 de febrero cambiaron las tornas y anunciaron su cancelación por orden del Gobierno de Suiza. Hasta el 15 de marzo no se pudieron convocar eventos que acogiesen a más de mil personas, lo que hizo que más de un evento en el Palexpo se cancelara. La indeterminación respecto al desarrollo del virus ha repercutido en la economía de proveedores o fábricas, pero también en las operaciones financieras a largo plazo que mueven el sector en su faceta de ventas.

El Salón es anual desde 1980, pero lleva sin cerrarse desde 1947. Ahora lo hará dos años consecutivos y no podrá competir con los otros dos salones más importantes de Europa: el de Fráncfort y el de París, que se enfrentan a sus propios problemas.