El fabricante británico nos muestra el que será su próximo grand tourer descapotable, identificado de nuevo, como es tradición en la marca, con la denominación Volante. Se trata del Aston Martin DB12 Volante, el cual no renuncia a las extraordinarias prestaciones de la versión cupé para que sus ocupantes puedan circular tanto a cielo abierto como protegidos bajo una capota tecnológicamente muy avanzada.

Este modelo fue desarrollado de forma paralela al Aston Martin DB12 Coupe, por lo que conserva su planteamiento técnico y mecánico. Bajo su capó delantero encuentra acomodo un propulsor de ocho cilindros en uve, con cuatro litros de cubicaje y provisto por Mercedes-AMG. Ofrece hasta 680 CV de potencia máxima, con 800 Nm de par. Así, la velocidad máxima asciende a los 325 km/h —clava el dato del Aston Martin DB12 Coupe—, mientras que el ejercicio de 0 a 100 km/h puede realizarlo en tan solo 3,7 segundos —solo una décima de segundo más lento que aquel—. La caja de cambios, fabricada por ZF, es también la misma automática de ocho velocidades que integra la versión cupé.

Ese desarrollo conjunto entre las dos carrocerías del sucesor del Aston Martin DB11 significa que el chasis de aluminio que soporta a ambos fue diseñado con el objetivo de ofrecer una rigidez extraordinaria también en esta variante descapotable. No obstante, fue necesario incluir algunos elementos nuevos, como un refuerzo transversal del motor que permite incrementar la rigidez torsional de este vehículo. También ha recibido algunos cambios de relativa importancia en sus suspensiones y en la dirección, todo ello con el objetivo de preservar las sensaciones de conducción y la precisión en su respuesta ante los cambios de dirección, características que Aston Martin destaca en este modelo.

El DB12 Volante, que ha dejado de ser la opción más “comedida”, ofrece el estímulo de un auténtico deportivo con el placer y la satisfacción exclusivos que solo un convertible de Aston Martin puede brindar”, ha comentado acerca de este modelo Roberto Fedeli, director técnico ejecutivo de Aston Martin

Por supuesto, el elemento protagonista de este modelo es su capota de lona. De accionamiento eléctrico, ha sido bautizada como “K-Fold” —doblez en K—, debido a su mecanismo de apertura en dos fases. Requiere 14 segundos para abrirse y 16 para cerrarse por completo, operaciones que se pueden realizar en marcha, siempre que no se superen los 50 km/h. Aston Martin destaca que, al recogerse y plegarse, los 260 mm de altura que adquiere son “un valor líder en su clase”. Cuando está situada sobre el habitáculo, las ocho capas de aislamiento que la constituyen permiten circular con gran comodidad. Por otro lado, podrá solicitarse en diferentes colores. Además del negro, tonalidad de serie, el rojo, el azul y una combinación de negro y plateado son también alternativas por las que podrán optar los futuros compradores.

El interior es prácticamente indistinguible del que presenta el Aston Martin DB12 Coupe. La única diferencia evidente radica en la inclusión de unos paneles de madera chapada o de fibra de carbono en los respaldos de los asientos, que tienen continuidad en los paneles interiores de las puertas. Por lo demás, el sistema de infoentretenimiento es el mismo —con una pantalla de 10,25 pulgadas de diagonal y táctil— y se mantienen los botones físicos para la gestión de determinadas funciones, como la climatización o la selección de los modos de conducción. Un sistema de sonido de Bowers & Wilkins, con 11 altavoces, complementa su dotación de equipamiento.

No hará falta esperar demasiado para poder contemplar físicamente por primera vez este Aston Martin DB12 Volante, aunque sí viajar a California. Su puesta de largo tendrá lugar en Monterrey, en el contexto del evento denominado The Quail, a celebrar el próximo viernes 18 de agosto. Su producción comenzará en septiembre de este mismo año, con las primeras entregas programadas para el mes de octubre.

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