Land Rover acaba de presentar la segunda generación del exitoso Range Rover Evoque, que ya lleva vendidas 772.096 unidades. Se trata de una profunda evolución del modelo, donde cambia prácticamente todo respecto a la generación anterior, modernizando la plataforma y ofreciendo nuevas motorizaciones que llegarán en 2019, como las semihíbridas e híbridas enchufables.
Motor y chasis
Su chasis continua siendo monocasco, pero ahora se basa en la nueva plataforma PTA (Premium Transverse Architecture), que posee muchas mejoras pensando en la electrificación y es un 13 % más rígida. Es lo suficientemente flexible como para ofrecer motores de gasolina, diésel, híbridos ligeros con batería de 48 V (MHEV) e híbridos enchufables (PHEV). Según Land Rover, la batería no robará espacio interior, ni mermará las capacidades todoterreno, pues se aloja en el suelo del vehículo.
En cuanto a suspensiones, mantiene el esquema McPherson delante, pero ahora con los topes rellenos de fluido, lo que debe eliminar ciertas vibraciones parásitas. En la parte trasera se mantiene el esquema multibrazo, pudiendo tener en ambos trenes la opción de la amortiguación electrónica, que se regula cada 10 milisegundos para adaptarse a las condiciones de conducción y contener mejor el balanceo, manteniendo a la vez el confort.
En cuanto a tamaño, tiene una longitud de 4.371 mm (+1 mm respecto a la generación anterior), 1.649 mm de altura (-11 mm) y 2.681 mm de batalla (+21 mm). Mantiene prácticamente las mismas proporciones, pero se mejora el espacio interior con una batalla más larga.
Hablando de las capacidades todoterreno, su ángulo de entrada es de 25º (+2º), el de salida es de 30º (-3º), el ventral es de 20º (-2º) y su capacidad de vadeo aumenta 10 cm hasta los 60 cm. Su altura libre apenas cambia, con 212 mm, lo que es un milímetro más que la generación anterior. Dudamos mucho que sus usuarios vayan a ponerlo a prueba en el campo, pero como todo buen Range Rover, se debe defender dignamente haciendo todoterreno.
Dispondrá de dos sistemas de tracción, denominados Stardard Driveline y Active Driveline. El primero reparte el par entre ambos trenes de manera constante, mientras el segundo es capaz de desconectar el tren trasero y dejar al Range Rover Evoque como tracción delantera, cuando no se requiera de tracción total.
En cuanto a motores, en el momento del lanzamiento Land Rover ofrecerá tres variantes de su motor 2.0 diésel y tres variantes del 2.0 de gasolina. Ambos motores son de cuatro cilindros en línea montados en posición transversal. Las variantes diésel ofrecerán una potencia de 147, 177 y 237 CV, mientras que los gasolina ofrecerán 197, 245 y 296 CV. Salvo una versión de acceso, que montará tracción delantera y caja manual de seis marchas, el resto de versiones serán tracción total e irán acompañadas de una caja ZF automática de nueve relaciones, que ha sido convenientemente ajustada al nuevo modelo.
Diseño y equipamiento
Al ver el diseño exterior lo primero que viene a la mente es el Range Rover Velar. Su frontal, lateral y trasera son prácticamente iguales a su hermano mayor. En cierta medida ha perdido exclusividad dentro de la gama, pues ahora no es diferente al resto. En cualquier caso continua siendo un diseño limpio y atractivo.
En un diseño tan cuidado hasta el mínimo detalle, me llaman la atención dos cosas: la primera es esa abertura encima de la matrícula, que rompe la limpieza del diseño frontal. Podrían haber optado por soluciones más elegantes, como prolongar unos centímetros la parrilla superior, o la inferior, en caso de necesitar más refrigeración; y la segunda es el alerón trasero. Desde un punto de vista lateral rompe la línea descendente del techo, y perturba la limpieza del diseño en esa parte.
En su interior se observa una renovación completa. Se mantienen las líneas maestras de su predecesor, pero ahora parece estar todo más integrado. Posee tres pantallas digitales: la del cuadro de instrumentos, la del sistema multimedia y la inferior de la consola para la climatización y parámetros del vehículo. Es táctil, pero tiene dos controles rotatorios encima de la pantalla para facilitar su manejo. Aquí llama la atención que Land Rover ha sustituido el anterior control de la caja de cambios que era rotatorio, por uno más convencional de palanca.
Dispone de algunas novedades, como el retrovisor interior llamado Clearsight, donde se puede seleccionar mediante un botón entre un espejo convencional, o una pantalla donde se proyecta la imagen de una cámara situada en la parte superior del vehículo. De este modo si el coche va totalmente cargado, no se obstaculiza la visión trasera.
Su maletero ahora tiene 591 litros de capacidad siendo un 10% mayor, mientras que si abatimos el asiento trasero, llega a 1.383 litros. El respaldo se puede dividir en tres partes, 40:20:40.
También dispone de varias cámaras en el frontal y lateral, que realizan una simulación de “capó invisible”. De este modo es como si el vehículo fuese transparente, haciendo más fácil la circulación por terrenos complicados. Dispone del sistema All Terrain Progress Control, que es un asistente de pendientes, y del Terrain Response 2, que regula diferentes parámetros para adaptarse a las distintas superficies por las que puede circular: Confort, Arena, Hierba-Gravilla-Nieve, Barro y Auto.
También destaca entre su equipamiento los faros matrix-LED, las llantas de 21 pulgadas, diversos asistentes como el de mantenimiento de carril, frenada de emergencia, detector de ángulo muerto o aparcamiento semi-automático.
En el apartado tecnológico, su sistema multimedia es compatible con Android Auto y Apple CarPlay, y posee un punto de acceso WiFi para ocho dispositivos, mediante enlace móvil 4G. Land Rover indica que se podrá obtener cierta información del vehículo desde un reloj inteligente. También dicen que existen ciertos algoritmos de inteligencia artificial que aprenden de las costumbres del conductor, y adaptan las configuraciones según sus gustos.
Las versiones de equipamiento serán Standard, S, SE, HSE, estando en el momento del lanzamiento la versión especial First Edition, que viene con un equipamiento muy completo y un precio especial. Hablando de precios, su horquilla estará comprendida entre los 40.000 euros de su versión más básica hasta los 76.950 euros de su versión más equipada. Las primeras unidades llegarán al principio de 2019, mientas las unidades MHEV y PHEV se incorporarán un año más tarde.
Pablo Mayo
Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.Pues vaya gracia para los que tienen un Velar. Ahora resulta que es clavado al Range “de los pobres” jajajaj