Poco a poco, los salones del automóvil están perdiendo visitantes, por lo que los fabricantes se replantean si es rentable ir o no. A fin de cuentas, se trata de obtener notoriedad y ventas. La notoriedad se puede conseguir ya por otros cauces, y el público es más reacio a pagar los dinerales que supone acudir a un salón internacional: vuelos, hoteles en temporada alta, etc.

Ford, Nissan, Infiniti y Volkswagen -como marca- no estarán en la cita bienal de París este otoño. Sí estarán Audi, Skoda, SEAT y Porsche. La presencia de Volkswagen en París 2020 no queda descartada por ello. En vez de un salón al uso, habrá “actos de comunicación” aparte, también en París. Vamos, que no están por la labor de gastarse dinero en una exposición tradicional, pero buscan un efecto similar en los medios de comunicación y las redes sociales.

Y es que un stand espectacular y visual, con un montón de coches, tíos que los limpian cada 5 minutos, azafatas macizas, hospitalitys y demás historias son facturas de siete cifras en euros o en dólares. Mucho coche hay que vender para cubrir eso. La alternativa es tener algo más cutrecillo, pero en ese caso, se queda en evidencia ante los demás.

Hace dos años, Volkswagen presentó en París el primer prototipo de la gama I.D., ese que anticipa la invasión de coches eléctricos de la marca

Los fabricantes podrían “sindicarse” y exigir a las ferias unos costes más razonables, o poner límites de gasto por cabeza… o lo que ya están haciendo, que es hacer números, y ver que tienen más notoriedad en el CES de Las Vegas (EEUU) o el Mobile World Congress de Barcelona. Recuerdo a todas las almas lectoras que venden coches y soluciones de movilidad, no móviles ni tecnología a secas.

Contrasta esto con el fiestorro de alto copete que Volkswagen solía hacer antes de salones clave, como el de Ginebra, que es una suerte de pre-salón en el que se invitan a cientos de periodistas e invitados, y donde realmente se presentan las novedades. Así no tienen que competir por la atención de los profesionales solo 12 horas después.

Volkswagen no es una marca cualquiera, es la marca matriz de uno de los tres fabricantes más importantes del mundo, el segundo en 2017 si no se cuentan los vehículos industriales pesados, y el primero si sí se cuentan. París tampoco es un salón cualquiera, es el segundo más importante de esta zona del mundo, solo por detrás de Ginebra, y que se celebra en los años pares, los impares se hace en Frankfurt.